Sábado 20.6.2020
/Última actualización 15:47
El año 1980 fue deslumbrante para Maradona. Con 20 años que cumplió el 30 de octubre de ese año, ya era la gran figura del fútbol argentino. En el Metropolitano, su humilde Argentinos Juniors fue subcampeón de River y Diego goleador con 25 tantos. En el Nacional, Argentinos ganó su grupo, perdió en cuartos de final con Racing de Córdoba (subcampeón de ese torneo) y Diego fue el goleador con 17 anotaciones. Fueron 42 goles en un año que lo tuvo también como protagonista de la selección argentina y la antesala de su transferencia a Boca.
Sacando aquél partido cuando ya jugaba para Boca y logró ganar en el Centenario, a Diego no le fue tan mal contra Colón (jugando para Argentinos ganó 3, empató la misma cantidad y perdió 2), pero con la camiseta del “Bicho” no pudo llevarse algún triunfo del Brigadier López.
En ese 1980 —el viernes se cumplieron 40 años del partido— Colón derrotó a Argentinos Juniors por 3 a 1. No fue un partido más, estuvo rodeado de muchas particularidades y hechos que ocurrieron, antes y después de ese partido. Empezando por una particularidad: a Colón lo dirigió el profesor Carlos Hurtado, que era por entonces el preparador físico del Gitano Juárez, que abandonó intempestivamente el club y se fue a dirigir a Independiente.
Colón venía de perder por goleada con San Lorenzo (4 a 0 en cancha de Huracán) y un jueves por la noche recibió a Diego en el Brigadier López. Los goles de Villarruel, Monzón y Casaccio le dieron el triunfo a los sabaleros, mientras que Favret fue el autor del único gol de Argentinos Juniors. En aquél equipo que dirigía el Zurdo López jugaba Bartolomei, un zaguero central que en 1983 se puso la rojinegra cuando el club ya militaba en la B. Y también el mencionado Favret —se fue al descenso con Colón al año siguiente protagonizando una recordada jugada en Rosario, cuando definió en cancha de Central ante la salida del arquero y la pelota se frenó en el barro centímetros antes de llegar a la línea de sentencia— y el “Pinza” Vidal, que vino a Colón en el 84, acompañando, entre otros, al regreso de Cococho Alvarez y la llegada de Sergio Omar Saturno, que había sido goleador del torneo anterior.
Al partido siguiente, Colón otra vez fue goleado. Esta vez, el verdugo fue Ferro, que lo goleó 5 a 1 en Caballito y obligó a que los dirigentes apuraran la contratación de un entrenador. ¿Saben quiénes fueron candidatos y hasta se mantuvieron charlas con ellos?, nada menos que Nelson Pedro Chabay y Alfio Basile. Chabay fue descartado porque “no tiene experiencia”. Quince años más tarde propició el ascenso a Primera. Y el Coco Basile dirigía en ese momento a Racing de Córdoba, que produjo una notable campaña en el Nacional, llegando a jugar la final con un Rosario Central demoledor por ese entonces.
La elección, al final, recayó en Néstor “Pipo” Rossi, quien llegó al club para asumir la conducción técnica de un plantel que con el paso de los meses empezó a tener inconvenientes económicos y se produjo una sangría importante de jugadores a finales de ese 1980. En el Nacional de ese año, sólamente pudo aventajar en la tabla de su zona a Cipolletti e Independiente Rivadavia de Mendoza. Una de las últimas alegrías de ese año se produjo en setiembre, cuando derrotó en el clásico a Unión por 2 a 1 con ambos goles convertidos por el defensor Jorge Omar Pellegrini, en cancha de Colón. Luego, muchos seguramente recordarán aquél partido con los mendocinos de Independiente Rivadavia, con apenas un puñado de espectadores en las tribunas.
En forma paralela a aquél partido con victoria frente al Argentinos Juniors del mejor Maradona, Colón se adjudicaba la final del torneo Apertura de la Liga Santafesina con un hecho muy particular: ganó el partido de ida por 2 a 0, perdió el de vuelta por 3 a 0 y debieron jugar allí mismo un tiempo suplementario. Y en ese suplementario, después de caer por goleada en los 90, Colón ¡ganó 3 a 0! y fue campeón.
En el partido de ida en el barrio Centenario, dos goles de Mattiller le habían dado el triunfo a Colón. En el de vuelta, en cancha de Sportivo Guadalupe, hubo tres goles de Zuchella para el triunfo de Pucará en los 90 y luego, Gramaglia, el “Gallego” Pérez Fernández y Carlos Mansilla de penal le dieron el triunfo final a Colón, equipo que era dirigido por el inolvidable Oscar Aguirre, el mismo que años después, en 1988, puso a Colón en una instancia decisiva para ascender a Primera.
¿Quiénes jugaban en Colón?, varios que luego llegaron a jugar en la primera. Gerold; Isidori, Saucedo, Schweizer y Acuña; Gramaglia, Soldano y Pérez Fernández; Perri (luego reemplazado por Carlos Mansilla), Martiller (luego suplantado por Daniel Guadalupe Pighín) y Ramón Mansilla, fueron los once titulares que puso el “Patón” en el partido de vuelta.
En su comentario, El Litoral destacó que “afloró la juventud y el mejor estado físico de Colón en el tiempo suplementario, debido a la gran preparación del profesor Raúl Della Crocce”. ¿Saben quién aparecía tibiamente y también con mucha juventud en Pucará?, ni más ni menos que Marcos Capocetti.
Como si fuese un elefante más para agregar al Cementerio, a Diego le costaba una enormidad llevarse algo de la cancha de Colón. Recién lo consiguió en 1981 con un Colón que se “caía a pedazos” y que encontraría el final de su permanencia en Primera, sumergido en una gravedad económica y deportiva de la que no pudo salir. La cantidad de jugadores que quedaron libres y la imposibilidad, para un Italo Giménez que asumía nuevamente en medio de tanta incertidumbre, de armar un equipo decoroso, hizo que el club bajara a la B, donde permaneció hasta que en 1995 logró la vuelta a Primera.
Colón 3
Argentinos 1
Cancha: Colón.
Arbitro: Abel Gnecco.
Colón: Erni; Araoz, Huens, Leroyer y Fertonani; Villarruel, Telch y Roldán; Monzón, Casaccio y Cariaga. A.S.: Quinteros. Estuvieron en el banco Rubén Rossi, Pedro Pasculli y Jorge Comas. D.T.: Carlos Hurtado.
Argentinos: Alles; Carrizo, Bartolomei, D’Angelo y Domenech; Vidal, Ríos y Maradona; Favret, Espíndola y Morel Bogado. A.S.: Soria. Estuvieron en el banco: García y Román. D.T.: Miguel Angel López.
Goles: en el primer tiempo, a los 42 m Villarruel (C). En el complemento, a los 9 m Monzón (C), a los 27 m Favret (AJ) y a los 43 m Casaccio (C).
Cambios: en Colón, Sañudo por Araoz. En Argentinos Juniors, Beaulieu por D’Angelo y Petti por Ríos.
Hugo Villarruel tiene dos anécdotas con Maradona que contó en El Litoral. Una de ellas fue en cancha de Argentinos, cuando armó una jugada estupenda eludiendo rivales y una mata de pasto lo hizo trastabillar y caer cuando iba a definir. Diego lo tomó de la cintura y le dijo: “Levántese, Maestro”.
La otra fue en cancha de Colón, pero no en la noche de 1980 sino en una tarde anterior. Fue un 1 a 1 y ambos hicieron los goles. Cuando terminó el partido, Maradona y Villarruel intercambiaron sus camisetas.