Por Darío Pignata
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A Prediger lo debe estar matando la ansiedad. A los dirigentes de Colón y a Mohamed, también. Es que, para que aparezcan las nueces (refuerzos), al ruido lo debe hacer la transferencia más esperada de los últimos tiempos en Colón, como es la del “Perro”. Se irá al Espanyol, al Benfica o a Boca. Pero se irá, eso está claro.
El “Turco” Mohamed debe tener en claro cómo reforzar el plantel. Pero, a priori, se recomienda vender el sudor para comprar goles. Primero, porque fue el gran déficit del equipo. Por eso se fue Guerrero y se irá Valdemarín, además de foguear en Tiro a Ledesma. Segundo, porque no se debería “abusar” de las hazañas de Esteban Oscar Fuertes: hizo 12 goles en la más absoluta de las soledades y a los 36 años. Además de gambetear ofertas por “Bichi”, hay que romper el chanchito Prediger comprando goles. Fue lo que le faltó al equipo para dar el salto. Y es lo que necesita para soñar con la Copa Libertadores 2010.