El 12 de diciembre, el Arzobispo de Santa Fe, Sergio Fenoy, firmó un convenio de comodato con el Reverendo P. Prior Provincial Fray José Baldini de la Orden de Predicadores para continuar con la actividad religiosa en el Convento Santo Domingo.
El Arzobispo Fenoy firmó un comodato con el Prior Provincial por nueve años. Se mantiene el culto, la celebración de la Sagrada Eucaristía y Sacramento de la Reconciliación. Además, se piensa un Centro de Espiritualidad.
El 12 de diciembre, el Arzobispo de Santa Fe, Sergio Fenoy, firmó un convenio de comodato con el Reverendo P. Prior Provincial Fray José Baldini de la Orden de Predicadores para continuar con la actividad religiosa en el Convento Santo Domingo.
El histórico templo de la capital provincial estuvo a punto de cerrarse por el retiro de la comunidad de los frailes dominicos. Desde que se conoció esa decisión se han alzado voces desde distintos sectores de la sociedad para que esa iglesia continúe abierta.
A finales de abril, El Litoral contó que la iniciativa era que el Convento no cierre sus puertas. Con una carta, el citado Prior, daba por sentado que las actividades religiosas continuarían en el lugar.
La novedad, a ocho meses de esa carta, es que el Arzobispo santafesino firmó el comodato para que se mantenga “el culto, la celebración de la Sagrada Eucaristía, el Sacramento de la Reconciliación y un futuro Centro de Espiritualidad por nueve años”, según se informó.
Al mismo tiempo, se nombró al ; y ha nombrado al Canónigo. Ricardo Bautista Mazza como Rector del lugar.
La nombrada misiva hablaba de: "Es de destacar, en primer lugar, que nuestro templo seguirá teniendo sus puertas abiertas como hasta ahora, de manera que siga siendo lugar de culto para todos los fieles de la ciudad y de modo especial para aquellos miembros más cercanos a la Orden", expresa en uno de los párrafos la misiva, se agrega que "es de gran importancia asegurarles que allí se podrá seguir celebrando la Santa Eucaristía y el sacramento de la reconciliación".
En la carta, el Prior Baldini remarcó que esta continuidad "será posible gracias a que, trabajando en conjunto con Monseñor Sergio Fenoy, se proveerá de un Rector del templo, quien garantizará el servicio sacramental y la actividad pastoral en el edificio conventual. Por otra parte, los frailes, aunque no residan en el convento, irán a Santa Fe para acompañar y apoyar a todos los laicos que son miembros de las Instituciones Dominicanas".
En 1670 se inició la construcción del convento Santo Domingo, que está ubicado en lo que hoy es la intersección de las calles 9 de Julio y 3 de Febrero.
Las celdas del histórico convento albergaron a Manuel Belgrano cuando en 1810 pasó por Santa Fe, camino al Paraguay. También el templo es custodio de los restos de la primera patricia argentina: Gregoria Pérez de Denis -quien donó sus bienes a Belgrano para financiar "la causa americana"-, y los de otros vecinos ilustres de la ciudad.
El inventario de 200 obras del Patrimonio Arquitectónico de Santa Fe se sostiene que entre 1906 y 1912 se concretó la reconstrucción de las distintas alas que conforman el claustro principal (único sector del convento que hoy se conserva), definido por las celdas y salas de uso comunitario y por sus galerías de arcos rebajados.
El templo consta de una nave única cubierta por una bóveda de cañón corrido interrumpida en el crucero para dar lugar al elevado tambor de la cúpula; la ornamentación, que ritma el espacio con una serie de columnas adosadas y de arcos de medio punto, se complementa con los medallones pintados al fresco. El exterior, con sus esbeltas torres y su cúpula, se destaca por su escala y lenguaje clasicista en el contexto homogéneo del barrio Sur.
La fachada, al igual que el espacio interior, se organiza según rigurosos cánones académicos y constituye uno de los más acabados ejemplos de arquitectura religiosa finisecular en Santa Fe; la preceptiva consiste en la articulación de un orden monumental con otro de escala humana y que sirve de estructura a cada uno de los elementos arquitectónicos aplicados al espacio.