La actividad económica retrocede en Rosario y golpea fuerte a los comercios
Tanto el municipio, como desde una avenida comercial y la Asociación Empresaria de Rosario advierten que hay una caída en el consumo que afectan de forma negativa al sector mercantil de la ciudad.
El último "gran impacto" en el comercio rosarino fue la reinauguración de La Favorita, en el microcentro. Las ventas aún están bajas en los paseos comerciales de la ciudad.
La disparada del dólar no oficial, el aumento galopante de la inflación y la potente pérdida del poder adquisitivo obligan a que los consumidores se vuelvan mucho más precavidos a la hora de gastar. Si lo hacen, se enfoquen en segundas y terceras marcas como principales opciones. El pronóstico de cara al segundo semestre es reservado y en el sector no hay mucho optimismo.
Tanto el municipio, referente de importante corredor comercial como el titular de la Asociación Empresaria local advierten que hay una caída en el consumo que está afectando de forma negativa el sector comercial de la ciudad.
El impacto de la macroeconomía y la incertidumbre de cara a quiénes serás los o las gobernantes de la ciudad, la provincia y el país, provocan reacciones nocivas para el mercado como, por ejemplo, tratar de ahorra en divisa extranjera (los que pueden), enfocarse en comprar lo esencial, dejar de lado las tarjetas para financiarse, entre otras medidas.
Las causas
El presidente de la Asociación Empresaria de Rosario (AER) y secretario general de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Ricardo Diab, señaló a este medio que "hay una caída de 3,6% promedio" en las ventas de todo el país, donde se detecta que sigue siendo Farmacia el "único rubro con crecimiento", mientras que todo lo demás, incluido Alimento y Bebidas, con "más de un 4% negativo en julio", aun trabajando con "segundas y terceras marcas", expone que a lo largo del primer semestre "llevamos un 1, 6% de negatividad" en comparación mismo período de 2022.
Desde su análisis, Diab expone que las principales causas que llevan a esta retracción económica se deben a "la caída del poder adquisitivo y los altos índices inflacionarios", que vienen sucediéndose no solo de este año, sino también desde el año anterior.
El último "gran impacto" en el comercio rosarino fue la reinauguración de La Favorita, en el microcentro. Las ventas aún están bajas en los paseos comerciales de la ciudad.
Ante este contexto, el referente del sector comercial resalta que hay que sumarle los factores de "la incertidumbre por cuestiones políticas y macroeconómicas y la falta de disponibilidad en las tarjetas de crédito". Es que los montos mínimos de estas "no alcanzan" para los valores de los productos y, además, los punitorios son demasiado elevados, impagables para muchos, entonces "se restringe el uso de la tarjeta".
Marcas alternativas
Un dato que refleja lo que se está viviendo en materia de consumo local es que las segundas y terceras marcas "ya son normales y habituales, en tiempos como los que se están viviendo que son de crisis". Si bien no son las primeras firmas, se tratan de productos de "muy buena calidad y a un precio más alcanzable por la sociedad". Sin embargo, no deja de ser un síntoma económico.
Diab es sincero y no ve mejoras en el futuro. "No creo que nada cambie demasiado en el segundo semestre. Hay mucha incertidumbre en materia política y económica –en período de elecciones-, sumado a que el que tiene pesos se está volcando a comprar dólares ante el temor de que se siga disparando, pero sabemos que se termina rápidamente esto, con lo cual no vemos que pueda haber cambios significativos en el resto del año", concluyó.
El centro también lo siente
Las ventas del corredor comercial San Luis -desde calle Moreno hasta San Martín, aproximadamente- es uno de los más pujantes y emblemáticos de la ciudad con más de 500 negocios. De algún modo, suele marcar el pulso de cómo vienen las ventas en términos generales, aunque siempre cada corredor tiene su singularidad.
En base a un comunicado impulsado por el Centro Comercial Calle San Luis, al que tuvo acceso El Litoral, las ventas en julio cayeron entre un 4% y un 15%, en comparación mismo mes del año pasado.
Miguel Ángel Rucco, representante del Centro, contó que el cambio climático, por los "días calurosos", afectaron fuertemente las ventas y obligaron a que los comerciantes tengan que "adelantar" la liquidación de la temporada de invierno.
Asimismo, pese a las ofertas, "la inflación no permite que se gaste", porque las personas "no llegan" a poder comprar nada. Este contexto "le saca confianza al consumidor, que se predispone negativamente al gasto".
Rucco coincide con Diab en que las personas piensan dos veces antes de gastar. Según el referente de San Luís, los consumidores se enfocan primera en cubrir "las primeras necesidades y elige qué consume".
Hoy se detecta que, entre las prioridades, se está eligiendo gastar en "esparcimiento y distracciones como gastronomía, pubs, entre otros". Es decir, "no están comprando artículos o productos, sino que lo postergan".
Efecto dólar
El referente detecta que la escalada del dólar ilegal es lo que, de algún modo, "distorsiona" la situación porque se genera una "corrida cambiaria" que afecta "directamente los precios" del corredor en general.
Según señala Rucco, no sólo se ven afectados los productos importados, sino también los nacionales, porque "todos tienen algún componente importado" que golpea de forma directa al costo. Entonces, "todo el combo desalienta el consumo y la decisión de compra sobre todo".
Para tratar de paliar esta situación e impulsar las ventas, este sábado 12 de agosto vuelve la "Gran Barata" de calle San Luis. El corredor se transformará en peatonal para que los clientes puedan aprovechar ofertas y liquidaciones para comprar los regalos de los más pequeños en la previa del Día de las Infancias.
El paseo se convertirá en peatonal de 10.30 a 13.30 entre Moreno y San Martín. Por eso, "invitamos a todos a una nueva edición de la fiesta, que ya es un clásico de la ciudad", indicaron. Habrá espectáculos infantiles, intervenciones artísticas, inflables y anticipan sorpresas para todas las familias.
Rosario en baja
La propia Municipalidad de Rosario también confirmó que la actividad económica se retrotrajo un 2,8 % en mayo. La cifra representa la mayor caída en lo que va del año, aunque destacan que se sostiene la tendencia al crecimiento del primer cuatrimestre.
El Centro de Información Económica (CIE) informó que la actividad en la ciudad dsminuyó por segunda vez este año. La diferencia en mayo fue mucho mayor que la de febrero, cuando la Municipalidad reportó un descenso del 0,9 % a partir del análisis del Derecho de Registro e Inspección (DReI).
El indicador mensual de facturación reflejó un aumento del 5,3 por ciento en comparación con el mismo período de 2022. De esta forma se mantiene la variación interanual positiva de manera ininterrumpida desde noviembre de 2020.
De acuerdo a los registros del DReI, los negocios de la ciudad facturaron 2,4% menos que en abril. El mismo resultado arrojó la comparación interanual.
A nivel general, los números de los comercios de Rosario representan el más de un tercio del total declarado en mayo. En particular, el descenso fue más pronunciado en los locales minoristas, donde las ventas se redujeron 3,6 por ciento.
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