El aluminio llegó a cotizarse en 3.236 dólares por tonelada durante la jornada del 8 de febrero, acercándose al máximo de 3.380 dólares alcanzado en 2008. Es el segundo día consecutivo que alcanza el máximo en 13 años. Desde principios de año, el metal incrementó su valor un 13%, pero esta tendencia solo continúa una dinámica general: desde mediados de diciembre del 2021, el precio del aluminio subió un 25% y más que se duplicó desde mayo de 2020.
La principal causa de la subida radica en que la producción no alcanza a satisfacer la demanda de un mundo que está recuperándose de la pandemia, aseguró a Sputnik Mundo el jefe de investigación del grupo Next Generation, Carsten Menke. El cierre de la producción en China, la crisis energética en Europa y las sanciones a Rusia agravan la situación, agrega.
"Si bien la producción china ha estado disminuyendo durante los pasados meses, los volúmenes de metal tanto en el mercado interno como en el internacional han estado creciendo lo que agrava la escasez (...) Además, Europa es un importante consumidor del aluminio ruso y, a la luz de las crecientes tensiones en torno a Ucrania, el mercado del aluminio parece asegurar un precio mayor ante el riesgo de más sanciones contra Rusia", explica el especialista.
Debido a la reducción de la oferta en el mercado, la imposición de tales sanciones hoy sería muy inapropiada, concluye Menke. Advierte que tal decisión podría conducir no solo a un aumento significativo en los precios del aluminio y sus derivados, sino también a más interrupciones en la cadena de suministro que irán mucho más allá del mercado del metal.
El pasado 7 de febrero la planta eslovaca Slovalco anunció que reducirá su producción en un 60% debido a los altos precios de la energía. En total, el Viejo Continente cuenta con una capacidad de producción estancada de 800.000 toneladas al año, mientras que China cesó varias plantas por unos tres millones de toneladas adicionales, calcula Goldman Sachs.
"Este año [2022] prevemos un considerable aumento de los precios del aluminio. Una de las claves de la escasez física es que tiene una propensión a extenderse, creando una volatilidad adicional en los precios en toda la economía", advierte la nota de los analistas de Goldman, Nicholas Snowdon y Jeffrey Currie.
Rusia es el mayor productor de aluminio fuera de China con alrededor del 13% del mercado. Aunque los analistas consideran poco probables la imposición de nuevas sanciones, el propio aumento de las tensiones en Ucrania provoca un incremento de los precios del gas y el cierre de más plantas siderúrgicas, apuntan. En el pasado, las sanciones al gigante Rusal afectaron especialmente a los productores europeos como BMW y Airbus.