El Litoral
La Administración Federal de Ingresos Públicos distribuirá esta semana unas 120.000 “inducciones electrónicas” a restaurantes, el sector rural, la construcción, fábricas de muebles de cocina y lavaderos industriales.
El Litoral
La Administración Federal de Ingresos Públicos distribuirá esta semana unas 120.000 “inducciones electrónicas” a restaurantes, el sector rural, la construcción, fábricas de muebles de cocina y lavaderos industriales. Inicia así un relevamiento sobre empleo informal que incluirá también a panaderías y confiterías, fábricas de pastas o geríatricos, entre otros.
Las intimaciones ya se iniciaron en comercios del área metropolitana del Gran Buenos Aires a partir de un cruzamiento de datos y de la aplicación del denominado Indicador Mínimo de Trabajadores. La AFIP preseleccionó así el universo de incumplidores “potenciales”.
Las empresas que reciban una carta electrónica deberán hacer un descargo en los próximos 60 días. Una segunda “carta electrónica de inducción” será sucedida por una inspección física.
La iniciativa pone en evidencia las urgencias del gobierno, que viene planteando sin éxito una ley de blanqueo laboral que alivie la situación de las pymes y regularice la situación del 40 % del empleo “en negro” de la economía nacional.
En cambio, y en un momento delicado para ese segmento de empresas, la Afip sale a detectar “presuntos” infractores.