Entre el pico de consumo de la energía de la semana pasada y el que se produjo este martes cinco minutos antes de las 14, hubo 50 megavatios de diferencia. La cifra equivale a 5 plantas como la que General Motors posee en General Alvear, en el Gran Rosario. Y la única explicación que cabe para que los máximos de demanda de potencia se haya corrido al horario de la siesta es simple: más usuarios residenciales utilizan sus aparatos de aire acondicionado.
Ayer a las 13.55, se presentó el punto más alto del consumo en toda la provincia, con 1.661 megavatios, que superó la marca de 1.608,2 megavatios de las 14.35 del 8 del corriente.
Si se observa la serie histórica de los máximos de demanda en la provincia, puede verse que desde que se produjo el cambio de horario en el país, en los días hábiles muy calurosos, los picos de demanda se han trasladado a las 14 horas, y los fines de semana se mantienen durante las últimas horas del día, entre las 22.30 y las 24.
El dato es importante, porque cada vez que se llega a estos puntos extremos, todo el sistema de generación, transporte y distribución de la energía queda en riesgo de colapso.
El martes en la ciudad, hubo fallas en instalaciones de baja tensión, que causaron 70 llamados de reclamos a la EPE. Como no hubo problemas en media tensión, no resultaron afectados barrios o zonas de la ciudad, sino usuarios puntuales.
La peor parte se la llevaron los pobladores del departamento San Justo: más de 50.000 personas quedaron sin servicio porque una estación transformadora (que además alimenta 10 localidades) se incendió porque el consumo excedió su capacidad.
Cabe señalar que no sufrió problemas la línea troncal de alta tensión (de 132 kW) de la EPE que abastece a San Justo (de ella dependen también ciudades como Nelson, San Javier, Calchaquí y Reconquista).
El auxilio alcanzará a cubrir sólo el 70% de los afectados en la región, y habrá cortes rotativos hasta que se complete la reparación de la Estación Transformadora de San Justo, que tiene sólo una y de ella también se abastecen las localidades del departamento, y Soledad en San Cristóbal.
San Justo a oscuras
El intendente de San Justo, Marcelo Mauro, calificó la situación de la ciudad como de tranquila, aunque con las quejas lógicas de los vecinos que desde la madrugada, cuando explotó el transformador que alimenta de energía eléctrica a la ciudad cabecera del departamento y localidades vecinas, están sin luz y con muchas dificultades para conseguir agua potable.
``La gente está sorprendida y molesta'', le dijo a El Litoral.
``Estamos trabajando con la hipótesis de que esta noche tendremos energía eléctrica para abastecer al 25 % de la ciudad, lo que se hará de manera rotativa: tendrán una hora cada cuatro'', explicó.
Por otra parte, aseguró que para este jueves tendrá normalizado el suministro de agua potable ya que hará funcionar las 18 bombas que abastecen la ciudad con equipos electrógenos que están trayendo de distintas localidades de la provincia.
Por otro lado, la Unidad Regional con cabecera en San Justo, delineó para la noche del miércoles un operativo de seguridad especial que contará con la colaboración de los gendarmes que están trabajando en el control del tránsito en la Ruta 11.
La explosión del transformador de la estación San Justo en la madrugada del miércoles, interrumpió el abastecimiento eléctrico a la cabecera del Departamento y a las localidades de Videla, Emilia, Angeloni, Cabal, Cayastacito, Naré, Colonia Esther, San Bernardo, Elisa y Soledad. En estas localidades la situación se había normalizado, salvo en las ubicadas al norte de San Justo.
A partir de esta situación, según se informó, la EPE puso en marcha su plan de contingencia para atender la situación, enviando desde distintos puntos de la provincia grupos electrógenos y una estación transformadora transportable para generar en la zona y comenzar la distribución de electricidad por sectores, de manera alternada.
Este miércoles se trasladó un nuevo transformador de potencia para reemplazar a la máquina afectada, estimándose su montaje y puesta en servicio en aproximadamente 72 horas, por lo cual recién el fin de semana estaría normalizada la situación.