El gol marcado por Santiago Biglieri a los 6 minutos del segundo tiempo le permitió hoy a Lanús plasmar su superioridad en la red y reencontrarse merecidamente con la victoria ante un Gimnasia y Esgrima La Plata que, a pesar del cambio de director técnico, sigue sin encontrar el rumbo futbolístico.
En unos primeros 45 minutos en los cuales hubo ritmo, pero no demasiada ideas y claridad, Lanús tuvo mayor protagonismo que Gimnasia y fue el que marcó la pauta del partido.
La clave, quizá, estuvo en que el equipo granate se adueñó de la mitad de la cancha gracias a la marca que impuso Agustín Pelletieri y la circulación que le dio Sebastián Leto, mientras que adelante tanto Santiago Biglieri como Cristian Fabbiani preocuparon a los defensores de Gimnasia.
Por su parte, el equipo dirigido por el colombiano Francisco Maturana jugó correctamente los primeros diez minutos, cuando Antonio Pacheco tuvo mucho contacto con la pelota y abasteció de juego a Luciano Leguizamón, especialmente, y al uruguayo Santiago Leal.
Esa pequeña diferencia que hizo Lanús le permitió crear mucho más peligro que su rival Carlos Kletnicki se encargó de contener un cabezazo de Santiago Biglieri y un remate de Fabbiani, mientras que Pelletieri y el mismo Biglieri no supieron aprovechar dos rebotes que dio el arquero de Gimnasia ante disparos de Fabbiani y Marcos Aguirre.
Gimnasia, mientras tanto, tuvo sus mejores chances a través de remates de larga distancia del chileno Alvaro Ormeño y Jorge San Estaban que se estrellaron contra el palo izquierdo del arco defendido por Carlos Chiquito Bossio.
En el complemento Gimnasia arrancó un poco mejor parado y gracias al trabajo de Ormeño consiguió colocar el balón en el campo de Lanús.
Pero ese pasaje concluyó a los 6 minutos, cuando Lanús finalmente marcó su gol. Fabbiani tomó el balón fuera del área grande, lo dominó y abrió el juego para el ingreso de Biglieri por izquierda, quien despachó un zurdazo que se introdujo en el arco.
A partir de entonces, Lanús reguló el ritmo, le cedió el campo y la pelota a Gimnasia y comenzó a sacar con mayor regularidad el contraataque. Por esa vía lo tuvo Sebastián Leto en dos ocasiones (la segunda sólo frente a Kletnicki) y Fabbiani.
Todo parecía bajo control hasta que a los 36 minutos Mauricio Romero interceptó con la mano un centro desde la derecha. Carlos Maglio cobró el penal y el uruguayo Santiago Silva con un derechazo violento hizo estrellar la pelota en el travesaño.
Hubiera sido injusto con Lanús que Gimnasia se llevara un punto, porque a lo largo de los 90 minutos el equipo conducido por Ramón Cabrero fue el mejor.
DyN