Jueves 18.4.2024
/Última actualización 10:29
Además de escritor de novelas, cuentos e historietas, el rosarino Walter Koza es uno de los tantos integrantes del cuanto menos curioso Club Palindromista Internacional, cuyo congreso anual, plagado de lúdicas actividades, fue hermosamente retratado en el documental ¡Viva el palíndromo! (2018) de Tomás Lipgot. El audiovisual - que puede disfrutarse de manera gratuita en la plataforma CineAR - expone la camaradería de un numeroso grupo de personas obsesionadas por encontrar palabras o frases reversibles, es decir que se leen igual de izquierda a derecha y de derecha a izquierda.
Koza es uno de ellos y es tanta su pasión que eligió plasmarla en un formato para nada habituado a este tipo de temáticas: el del humor gráfico. Claramente no tuvo que convencer a muchos, no solo es responsable del sello que edita la obra, sino que este último se destaca, ante todo, por la publicación de historietas que de cierto modo rompen con las prisiones propias del medio, explorando posibilidades creativas. Sin ir más lejos, el primer lanzamiento de Leitmotiv Editora fue el rescate de “El otro”, de Ángel Mosquito, una novela gráfica sin diálogos ni textos, publicada originalmente en 2004 que narra el encuentro del hombre de Neandertal con el Homo Sapiens.
“Si bien, desde hace tiempo conozco sobre el tema y soy devoto del OuLiPo - grupo de experimentación literaria cuya esencia es la de establecer reglas, a veces arbitrarias, para generar textos -, el disparador fundamental para mi trabajo fue el documental de Tomás Lipgot. Enterarme de que existe un Club Palindromista Internacional me voló la cabeza y empecé a ver qué se me podía ocurrir. Al principio los subía en mi Facebook y, cuando abrí mi instagram, sacaba una captura de pantalla o una foto, si lo escribía en manuscrito. Un día me di cuenta de que la cosa quedaba mejor con una ilustración que lo acompañara y ahí empecé. A eso le sumo que, en octubre del 2022, se me ocurre hacer el "palindrotuber", en sintonía con el inktober, reto viral creado por el dibujante Jake Parker, donde subía un palíndromo ilustrado por día. La mayoría de estos fueron compilados en el libro”, sostiene Walter Koza en charla con Mirador Provincial.
GentilezaEl libro del que habla el autor es “Abatataba: Palíndromos Ilustrados", un trabajo construido desde el juego que navega por el fascinante mundo de los palíndromos, en esta oportunidad, desde el chiste gráfico.
“¿Qué es un palíndromo? Un palíndromo es una expresión que puede leerse tanto de izquierda a derecha, como de derecha a izquierda. De atrás para adelante y de adelante para atrás. Un palíndromo deviene en un círculo sintagmático y vicioso. Y los palindromistas somos eso, viciosos. Con pasión lasciva nos sumergimos en un laberinto de palabras, buscando caminos bifrontes, simétricos, espejados. Por si fuera poco, algunos, como el caso del autor de este libro, los acompañan con dibujos”, apunta la contratapa del tomo.
La edición de Leitmotiv, dedicada a los amantes de lo capicúa, se compone de 60 páginas a todo color plasmadas en un modesto y cómodo formato de 15 x 15 cm. Su diseño, maquetado y letreado corren por cuenta de Mariana Salina mientras que el diseño de tapa, contratapa y edición de originales son obra de Leonardo Moreno.
El trabajo denota un fuerte compromiso y pasión por el lenguaje. Es principalmente una oda a la palabra, una obra acerca del poder de las mismas. En este sentido Walter Koza como autor, las trata como un artesano, como si fueran un objeto moldeable, reconstruyendo en cada viñeta su significado. Irónicamente las atraviesa desde el dibujo, también desterrando los prejuicios reinantes que indican que lo visual tiende a reemplazar a la palabra.
“Respecto de otros casos que combinen dibujos y palíndromos, te puedo mencionar a José Pablo García, dibujante español y los trabajos de miembros del OuBaPo - goza del estilo del movimiento literario Oulipo pero orientado a los cómics -, como François Ayroles, Jochen Gerner, J-C Menu o Étienne Lécroart. En Argentina, no he encontrado otros casos de palíndromos ilustrados, pero el país cuenta con grandes palindromistas, como Juan Filloy, genio absoluto, y Tav Ripo, que ya ha publicado un par de libros”, explica el artista.
"Abatataba" es un producto muy logrado, dueño de una ternura y simpleza indiscutibles. Las sonrisas surgen con naturalidad desde las primeras páginas. Koza, por ejemplo, dedica el libro a su madre, lisa y llanamente porque “Edipo lo pide”. Existe un mix perfecto, dos cosas en apariencia completamente incompatibles consiguen llevarse de maravillas. El palíndromo, entonces, reviste carácter humorístico. “Ser o no ser”, reza un poeta; y la vaca responde: “Res o no res”. “No, el ágape se paga, león” explica un mozo mientras el animal expresa su descontento con un “¡Grooaoorg!”. “¿Apila ud Dua Lipa?”, dice un empleado de un deposito a la cantante y compositora. Son algunas de las tantas viñetas presentes que expresan la buena dinámica de la compilación.
Como en todo juego, lo importante es ser parte, y por ello Koza se permite en algunos casos instruir al lector. Así comprendemos que existen “Palíndromos por palabra”, “Palíndromos circulares” o “Palíndromos silábicos”. Todos ellos funcionan enarbolando la premisa de que la palabra puede ser otra cosa según como se la use.
Sin embargo, la mayor virtud de “Abatataba: Palíndromos Ilustrados" es la de sembrar la semilla de la búsqueda. Tras finalizar el tomo los lectores gozaran de una nueva profesión, serán un poco detectives de las palabras, buscando palíndromos en cada paso que den. Por supuesto deberán tener mucho “ojo”, estar atentos y prestos a “reconocer” porque gracias al trabajo de Koza aquello que antes pasaba desapercibido pudo haberse convertido completamente en “oro”.
Gentileza-¿Por dónde pensás que puede llegarle al público?
-Si te referís a estrategias de márketing, estoy abierto a consejos, ja, ja, ja. El tipo de lector que me imagino remite a aquel que disfruta de los juegos formales y se divierta siguiendo el laberinto que se autoimpuso el artista. Y considero dos opciones, el lector que sabe que le gustan esas cosas, y al que hay que invitar a que lo conozca. Para ello, creo que difundir lo que publica la editorial por redes sociales es fundamental (aunque soy enemigo de ser esclavo de ellas) y también tener presencia en eventos de historieta. Respecto de la distribución, el libro se distribuye en comiquerías, gracias a Che Distribución, y, como menciono, en eventos a los que puedo ir.
-¿Qué otros proyectos piensan editar con Leitmotiv?
-Leitmotiv Editora se propone desarrollar una línea en los que se puedan ver diversas propuestas desde el plano de las restricciones formales (reitero mi devoción por el movimiento OuBaPo). Hasta el momento, para este año, están proyectados dos libros, una antología de historias breves (cada una de ellas con una propuesta formal diferente), con guiones de María Eugenia Alcatena y dibujos de Muriel Frega, y un poema-relato infantil, “El ataque de las vaquitas de San Antonio Gigantes”, con textos míos y dibujos de Cinthya Rubianes. Amén de otros proyectos que se encuentran en diversas fases de desarrollo
Walter Koza (Rosario, Argentina, 1976). Es lingüista; escribe guiones, cuentos, novelas, y, de vez en cuando, dibuja. Publicó los libros Humor metafísico (humor gráfico, Mala Praxis Ediciones), El guardameta (novela, Expreso Nova Ediciones) y Secretos del mundo animal (cuentos, Zeta Centuria Ediciones). En 2017, editó la antología de historietas sobre maternidad Edípica (Mala Praxis Ediciones/Loco Rabia Ediciones). Es miembro del Club Palindromista Internacional, y en 2023 dio el primer paso como editor con el sello Leitmotiv Editora, focalizado en la edición de historieta formal.