Pocos hijos de famosos han generado tantos titulares como el primer bebé que han tenido Elon Musk y Grimes: cuando el millonario anunció que habían decidido llamar a la criatura X Æ A-12, las redes se llenaron de mensajes preguntando a la pareja por qué habían puesto a su bebé un nombre de robot o de nuevo modelo de coche Tesla.
Lejos de perder la paciencia, tanto el millonario como la cantante se tomaron con humor este revuelo. Al menos lo suficiente como para contar el origen de este particular nombre y, de paso, explicar cómo debía pronunciarse. Lo que ya no les habrá hecho tanta gracia es descubrir que en California no permiten inscribir en el registro a nadie que se llame así. Un inconveniente que ha obligado a los recién estrenados padres a modificar sus planes.
¿Cuál es el problema? Que las leyes del estado prohiben que los nombres tengan números. Solo se aceptan aquellos que estén compuestos por letras. De ahí que tal y como acaban de confirmar Musk y Grimes, al final hayan tenido que recurrir a la numeración romana para poder registrar oficialmente a su criatura, que desde hoy se llama X Æ A-Xii.
“Honestamente creo que ahora queda mejor con números romanos”, afirmaba la cantante en los comentarios de su última publicación de Instagram donde varios fans le han interrogado por este cambio. “Por cierto, el guion sí está permitido en el nombre”, añadía.
En cualquier caso, más allá de la grafía, en esencia tampoco ha cambiado tanto el nombre de la criatura. Escrito con letras o con números, cuando le llamen en voz alta el muchacho seguirá escuchando ‘Ex Ash Ei Twelve’. Será cuestión de acostumbrarse.