A principios de los años ‘70, los lectores de Santa Fe buscaban libros de amor, guerra y política. Una búsqueda en el archivo de El Litoral revela los títulos que marcaron tendencia hace poco más de 50 años.
Tres de los libros que eran elegidos por los santafesinos a principios de los ‘70 según consta en el archivo de El Litoral. Foto: Emecé / Archivo
A finales de 2024 se conoció el ránking de los libros más leídos en la Argentina durante el año que acaba de terminar. Elaborado por la librería online Buscalibre Argentina, ubicó a “Trono de cristal” de Sarah J. Maas, “Nexus” de Yuval Noah Harari, “Hábitos atómicos” de James Clear, “La Casa Neville” de Florencia Bonelli y “El duelo” de Gabriel Rolón en los primeros puestos. A su vez, entre los autores más buscados por los argentinos, según la misma fuente, aparecieron (además de Rolón y Bonelli) Jessica Rivas, Rebeca Yarros, Sarah J Mass, Gisela Gilges, Han Kang y Santiago Silberman.
Pero, ¿qué se leía hace medio siglo en la ciudad de Santa Fe? En el archivo de El Litoral fue posible hallar un relevamiento realizado en las librerías locales que funcionaban en aquel momento, que arrojó resultados interesantes: el artículo, publicado en enero de 1972, 53 años atrás, señala el éxito que tuvo entre el público local el libro “Love Story”, de Erich Segal, a tono con lo ocurrido en varios países de Occidente.
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No es casual: “Love Story” es la novela que dio origen a la película de Arthur Hiller, protagonizada por Ali MacGraw y Ryan O’Neal, una de las más taquilleras de la historia del cine producto de su anticuada y lacrimógena trama. De acuerdo al artículo de El Litoral, que consultó a Néstor Lammertyn, entonces al frente de editorial Colmegna, “las preferencias del público se han mantenido en los temas político-históricos y de guerra, volviéndose a la historia romántica con el libro de gran éxito ‘Love story’”.
El año anterior, 1971, había sido bueno para los autores argentinos, ya que entre los “best sellers” figuraban Abelardo Arias, Silvina Bullrich, J. L. Borges, Marta Lynch, Manuel Puig, Félix Luna, Ernesto Sábato, Eduardo Mallea. Syria Poletti, María Granata y Poly Bird. También, de acuerdo al relevamiento de los cronistas de El Litoral, había sido provechoso (al menos en el mercado de la ciudad y alrededores) el rendimiento de las obras de autores regionales. De hecho, habían publicado en Santa Fe autores chaqueños, correntinos, entrerrianos, santafesinos y rosarinos, con ediciones en muchos casos agotadas.
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“Las colecciones Entre Ríos y Apertura, publicaron 18 títulos, con buena venta. Por otra parte debemos destacar que hay entidades crediticias oficiales que apoyan y financian la edición de libros regionales, lo cual brinda mayores posibilidades para difundir la obra del autor novel”, especifica el artículo mencionado.
Otra de las fuentes consultadas por El Litoral para relevar qué leían los santafesinos fue la gerencia de Libretex, que funcionaba en San Martín al 2100. De acuerdo a esta fuente, “la nueva generación, de 17 a 25 años, es la que continúa buscando la solución, a través de la literatura, de los problemas actuales en lo social, lo económico y lo político, que reflejan los libros argentinos y extranjeros”.
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Los textos más elegidos
Según Libretex, los títulos de mayor aceptación local entre 1971 y principios de 1972 fueron “Cuentos para leer sin rimmel” y “Cuentos para Verónica” de Poldy Bird. También “Ruedas” de Arthur Hailey, ambientado en el mundo de la industria automotriz y las competencias automovilísticas y “Amanecer blanco” de James Houston, un canadiense que vivió durante 12 años con los esquimales en la zona canadiense del Ártico y utilizó ese bagaje para su libro.
Archivo El Litoral
Otro de los textos elegidos fue “Los mercenarios” de Jean Larteguy, que traslada a los lectores a escenarios de conflictos internacionales. Milan Kundera y su obra “La broma” también figuró en la lista. Se trata de un relato satírico sobre el totalitarismo en la era comunista. “Islas en el Golfo”, novela póstuma de Ernest Hemingway fue requerida por los santafesinos. Narra la vida de un pintor que vive en Bimini (Bahamas) a mediados de los años ‘30. “Papillón”, la famosa novela autobiográfica del francés Henri Charrière y “El asiento el piloto”, de Robert J. Serling, ocuparon también una parte destacada de la lista.
“Según venga el juego”, de Joan Didion, que narra las crisis de una actriz de 30 años que se ha mantenido siempre bajo la sombra de su marido, un director de Hollywood y “Un bolsillo lleno de vodka” uno de los mejores libros del novelista escocés A. J. Cronin, fueron a su vez nombrados por los dueños de Libretex, al igual que la mencionada novela “Love Story”, “En la noche de los tiempos” de René Barjavel, “Hotel” de Arthur Hailey, la historia de un hotel de Nueva Orleans y la lucha de su gerencia para no ser absorbido por una cadena.
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Entre los ensayos solicitados, “Ni Marx ni Jesús” de Jean François Revel; “Amor y voluntad” de Rollo May, “Democracia” de Dorothy Pickles, “Carta a Buenos Aires violento” de Eduardo Gudiño Kieffer; “Carta a la juventud de hoy” de André Maurois; “Carta a los hijos” de Silvina Bullrich y “Carta a Judas” de María Angélica Bosco.
Respuestas
El contraste entre las preferencias de lectura de los santafesinos hace más de medio siglo y las actuales muestra cómo cambian los intereses culturales de una sociedad, pero también cómo algunas búsquedas permanecen inalterables. Si en los ‘70 las historias románticas y los relatos políticos o existenciales fueron tendencia, hoy los lectores se debaten entre la fantasía épica, los manuales de desarrollo personal y las ficciones sobre conflictos emocionales y sociales. Sin embargo, algo atraviesa ambos períodos: la necesidad de hallar, en los libros, respuestas a los dilemas de cada época.
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