Un tribunal hondureño condenó el miércoles a 14 años en prisión a la exprimera dama de Honduras, Rosa Bonilla, por cargos de fraude y apropiación indebida de fondos públicos destinados a programas sociales
Rosa Bonilla, esposa del expresidente Porfirio Lobo, fue encontrada culpable de apropiarse de fondos públicos.
Un tribunal hondureño condenó el miércoles a 14 años en prisión a la exprimera dama de Honduras, Rosa Bonilla, por cargos de fraude y apropiación indebida de fondos públicos destinados a programas sociales
El portavoz de la Corte Suprema de Justicia, Carlos Silva, anunció: "La ex primera dama Rosa Elena Bonilla ha sido condenada a 14 años y un mes de cárcel por los delitos de fraude continuado y apropiación indebida de fondos públicos destinados a programas sociales".
Bonilla, de 55 años, fue acusada en 2018 de desviar poco más de medio millón de dólares. La investigación en su contra fue impulsada por una comisión anticorrupción de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Es la segunda vez que es condenada por delitos de corrupción en el mismo caso. La primera vez recibió una pena de 58 años de cárcel, pero la condena fue anulada por inconsistencias en el proceso y se ordenó repetir el juicio.
Según el Ministerio Público, la esposa del exmandatario se apoderó de más de 12 millones de lempiras (unos 480.000 dólares), que tomó de una cuenta a nombre del Despacho de la Primera Dama y Casa Presidencial y depositó en su cuenta personal días antes de que terminase el gobierno de su esposo.
La Fiscalía también señala que se apropiaron de 16 millones de lempiras, siendo unos 650,000 dólares, que sacaron a través de más de 70 cheques emitidos a nueve empresas de fachada entre 2011 y 2015.
La investigación, que duró cuatro meses, concluyó con la captura de la exprimera dama en febrero de 2018. El 4 de septiembre de 2019, en el primer juicio, la esposa del expresidente Lobo Sosa fue condenada a 58 años de prisión por tres delitos de apropiación indebida y ocho de fraude, mientras que Escobar recibió una pena de 48 años de prisión por varios delitos de fraude.
No obstante, el 13 de marzo de 2020, la sala de lo penal de la Corte Suprema de Justicia anuló la sentencia de ambos y ordenó la realización de un nuevo juicio.