Así lo manifestó el neerlandés Mark Rutte, quien asumió como nuevo secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en reemplazo del noruego Jens Stoltenberg.
Mark Rutte, de 57 años y reconocido por su franca manera de hablar con sus pares y por su alta capacidad diplomática, sustituye desde este martes, 1 de octubre de 2024, al noruego Jens Stoltenberg al frente de la OTAN. El diplomático nórdico deja el cargo después de una década, mientras que Rutte lo asume con un nuevo liderazgo, que deberá quedar plasmado al frente de una alianza militar que espera ansiosamente el resultado de las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
"Seré capaz de trabajar con ambos candidatos (en referencia a Kamala Harris y Donal Trump) sea cual sea el resultado de las elecciones y, por supuesto, no puedo votar, así que veremos lo que pasa", aseguró Rutte en rueda de prensa junto al secretario general saliente de la Alianza, en la sede de la organización, en Bruselas. La gestión de Stoltenberg ha atravesado momentos difíciles, como la guerra de Rusia contra Ucrania, el aumento del poderío de China y el primer gobierno de Donald Trump en Estados Unidos.
Tras llegar al cargo en 2014, el mandato de Stoltenberg se ha renovado tres veces. "Tenemos que asegurar que Ucrania prevalece como una nación soberana, independiente y democrática", comentó Rutte en la rueda de prensa, en la que aseguró que este tema ocupa uno de los lugares más importantes en su agenda. "Debemos cumplir lo acordado en la cumbre de Washington, el mando, el compromiso financiero y el camino irreversible de Ucrania hacia la adhesión", indicó Rutte durante la ceremonia celebrada ante el Consejo del Atlántico Norte, en la que tomó el relevo de Stoltenberg.
"Hay que trabajar con quien esté en la pista de baile"
Rutte también incluyó entre sus prioridades la disuasión y defensa y, en ese sentido, consideró que se debe gastar más e incrementar la defensa colectiva. Además, dijo querer ampliar sus lazos con la Unión Europea y con países "que compartan nuestros intereses y valores". Por otra parte, las elecciones previstas para el 5 de noviembre en Estados Unidos, en las que el republicano Donald Trump disputará contra Kamala Harris su posible retorno a la Casa Blanca, se supone que definirán para el ex premier neerlandés su mandato de cuatro años al frente de la OTAN.
¿Por qué pasa a ser tan importante el resultado de las presidenciales estadounidenses? En primera instancia porque Durante su campaña electoral, Trump amenazó con no mantener la protección de aquellos países de la OTAN que no inviertan lo suficiente en defensa, un paso contrario a la espina dorsal de la alianza militar. Trump también sugirió que podría llegar a un "rápido acuerdo" con el presidente de Rusia, Vladímir Putin, para poner fin al conflicto en Ucrania.
Rutte fue extremadamente hábil en su trato con Trump durante su etapa como primer ministro de los Países Bajos, cargo que ocupó entre 2010 y 2024. Justamente, el nuevo secretario general de la OTAN ya ha sugerido a otros países de la alianza que "dejen de quejarse" por el posible retorno del volcánico estadounidense al poder. "Hay que trabajar con quien esté en la pista de baile", dijo Rutte en febrero. Otro de los desafíos de Rutte será mantener la presión a los países de la alianza para que aumenten sus gastos en Defensa. Este año, 23 de los 32 países del bloque alcanzarán la meta de invertir en Defensa el equivalente al 2 por ciento de sus respectivos PIB.
Condena de la UE
La Unión Europea (UE) "condena en los términos más enérgicos el ataque de Irán contra Israel", declaró horas atrás el jefe de la diplomacia europea, el diplomático español Josep Borrell. "El peligroso ciclo de ataques y represalias corre el riesgo de descontrolarse. Es necesario un alto al fuego inmediato en toda la región", escribió en la red social X. "La UE sigue plenamente comprometida a contribuir a evitar una guerra regional", agregó.