Un tribunal de Venezuela ordenó este jueves detener al líder antichavista Leopoldo López, quien está dentro de la residencia del embajador español desde hace dos días, después de haber violado su arresto domiciliario y haberse sumado al fallido levantamiento cívico-militar liderado por Juan Guaidó el martes pasado.
A López se le revocó la medida de detención domiciliaria "por violarla flagrantemente", dice una nota de prensa difundida por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
La corte señala que el antichavista, privado de libertad desde 2014 y sentenciado a casi 14 años, también violó "la medida referida a la condición relativa a pronunciamientos políticos por medios (de comunicación) convencionales y no convencionales, nacionales e internacionales, demostrando con ello la no sujeción a las medidas".
"En vista de lo señalado, el juzgado en su decisión libra orden de aprehensión dirigida al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en contra del ciudadano Leopoldo López", agrega el texto, citado por la agencia de noticias EFE.
El tribunal ordena además que López continúe cumpliendo su pena -de la que ya ha purgado cinco años, dos meses y doce días- en la cárcel militar de Ramo Verde, donde estuvo recluido hasta mediados de 2017.
Tenés que leerVenezuela: sube a cuatro el número de muertos en las últimas manifestacionesEn tanto, la vivienda de López fue allanada y robada por varios sujetos a quienes diversos testigos identificaron como miembros de Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) según informó la agencia de noticias Europa Press.
"Fue el Sebin, el Sebin de los malos porque hay sebines patriotas que quieren la libertad de Venezuela", afirmó Lilian Tintori, esposa de Leopoldo López, a la televisión pública española (TVE), al entrar a su domicilio por primera vez para revisar los desperfectos.
Tintori y López se encuentran en la residencia del embajador de España en Caracas, donde han sido recibidos, si bien no han solicitado asilo político.
López fue liberado el martes por un grupo de militares y funcionarios del Sebin que se habían unido al jefe del Parlamento, Juan Guaidó, proclamado presidente interino y reconocido por 54 países.
Junto a Guaidó, participó en un levantamiento militar junto a cerca de 40 militares que se dirigieron a la base aérea La Carlota, que volvió a prender la mecha de las manifestaciones opositoras en Venezuela.