Estados Unidos y China anunciaron la implementación de regulaciones al uso de ChatGPT, al incumplir la normativa sobre protección de datos y carecer de filtros para menores.
La decisión fue tomada tras determinase que no cumple la normativa sobre protección de datos y carece de filtros para menores.
Estados Unidos y China anunciaron la implementación de regulaciones al uso de ChatGPT, al incumplir la normativa sobre protección de datos y carecer de filtros para menores.
De esta manera, ambos países se suman a la decisión de Italia, que alegó la falta información para los usuarios y para todos los interesados cuyos datos recoge OpenAi y "una base jurídica que justifique la recogida y la conservación masiva de datos personales" para su prohibición.
El gobierno estadounidense dispuso un período de 60 días para recoger ideas sobre cómo legislar contra los efectos negativos de estos programas, que suponen un riesgo en campos tan dispares como la privacidad, la desinformación o el mercado laboral.
Por su parte, la Administración del Ciberespacio de China dio a conocer un proyecto para regular los servicios de inteligencia artificial generativa, y aseguró que quiere que las empresas presenten evaluaciones de seguridad a las autoridades antes de lanzar sus productos al público.
La normativa señala que los proveedores serán responsables de la legitimidad de los datos utilizados para entrenar sus productos de inteligencia artificial generativa y que se deben tomar medidas para evitar la discriminación al diseñar algoritmos y entrenar esos datos.
Más allá de lo sucedido en Italia, la Unión Europea pretende que los contenidos generados por inteligencia artificial lleven una advertencia específica para alertar a los usuarios. Alemania, Francia e Irlanda también implementarían regulaciones en el corto plazo.