El maquillaje es un aliado inseparable de la belleza, pero mantenerlo impecable a lo largo del día puede ser un desafío. El clima, la humedad y el ritmo agitado de la vida cotidiana pueden poner a prueba la resistencia de tu maquillaje. Sin embargo, no te preocupes, estamos aquí para revelarte algunos secretos infalibles que harán que tu maquillaje dure mucho más tiempo y luzca como recién aplicado.
Preparación es clave
Antes de comenzar con tu rutina de maquillaje, asegúrate de tener una piel limpia e hidratada. Utiliza un limpiador suave y aplica una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel. Una base sólida asegura un lienzo uniforme para tu maquillaje y ayuda a que este se adhiera mejor.
Primer, el secreto oculto:
No subestimes el poder de un buen primer. Aplicar un primer facial antes de tu base ayudará a minimizar los poros, suavizará la piel y proporcionará una base perfecta para que el maquillaje se adhiera y dure más tiempo.
No escatimes en un buen fijador de maquillaje. Después de completar tu rutina de maquillaje, rocía un poco de fijador en tu rostro. Esto sellará tu maquillaje y ayudará a que permanezca en su lugar durante todo el día.
Polvo translúcido:
El polvo translúcido es tu mejor amigo cuando se trata de mantener el maquillaje en su lugar. Aplica una capa fina de polvo después de la base y de cada capa de maquillaje líquido para sellar y matificar la piel.
Mantén algunos papeles matificantes o "blotting papers" en tu bolso para retocar tu maquillaje durante el día. Estos papeles absorben el exceso de grasa sin arruinar tu maquillaje.
Evita tocarte la cara:
Tocar constantemente tu rostro puede transferir aceite y bacterias a tu maquillaje, haciéndolo menos duradero. Trata de evitar tocarte la cara innecesariamente.
Siguiendo estos simples consejos, podrás mantener tu maquillaje impecable durante horas y lucir radiante a lo largo del día, sin importar las condiciones externas.