Personalmente, por tener una posición política cercana al Desarrollismo, estoy a favor de todo lo que hacen nuestros empresarios para producir y generar empleos porque la consecuencia más inmediata de todo esto es que hacen Patria.
Cuando hablamos de la Patria -palabra que ningún discurso de la diplomacia de las buenas costumbres pronuncia-, deberíamos tener en cuenta a nuestros abuelos y padres que forjaron este país que alegremente estamos fundiendo.
Personalmente, por tener una posición política cercana al Desarrollismo, estoy a favor de todo lo que hacen nuestros empresarios para producir y generar empleos porque la consecuencia más inmediata de todo esto es que hacen Patria.
En vista a las Elecciones Legislativas que se definirán el próximo domingo 14 de noviembre, analizamos a los Candidatos que serán votados para luego asumir sus funciones, y nos preguntamos ¿quiénes de todos los que se presentan son Empresarios?, ¿Alguno tiene en su historia haber pasado por los riesgos que debe enfrentar un empresario o el desafío de incrementar la capacidad productiva o de dar trabajo? No hay.
Solamente nos encontramos con los permanentes intermediarios. Con los que dicen "vamos a dar Salud, Educación y Trabajo" y no saben de qué se trata, pero son los que van a legislar y a gobernar en nombre del pueblo. También lo harán en representación de los hacedores, quienes solamente podrán -en algún momento- esbozar un reclamo por lo decidido sobre sus bienes, que son puestos en riesgo por que los que gobiernan que tocan de oído porque no saben nada del tema.
La información que nos llega a través de los medios periodísticos da cuenta de encuentros realizados entre las distintas Cámaras que representan a todos los Empresarios y las más altas autoridades políticas que gobiernan en contra de los intereses de esos mismos empresarios, pero lo hacen a través de una diplomacia rayana a la hipocresía.
Me pongo en el lugar de los Empresarios y entiendo que lógicamente tienen que hacer buena letra para que los Funcionarios los reciban en sus despachos, para no lograr nada, mientras los gobernantes ponen cara de circunstancias cuando los tratan con respeto y mientras los aplauden, cuando en todos lados los putean.
Sres. Empresarios, son responsables junto a quienes nos gobiernan hace cuarenta años, sean oficialistas o de la oposición, porque nuestra Patria está diezmada.
La figuración, la corrupción, el trabajo en negro -que es la no declaración de la realidad de cada empresa- son situaciones que ya no se pueden tapar y los mismos que festejamos y a los que aplaudimos, son todos responsables.
Cuando hablamos de la Patria -palabra que ningún discurso de la diplomacia de las buenas costumbres pronuncia-, deberíamos tener en cuenta a nuestros abuelos y padres que forjaron esta Patria que alegremente estamos fundiendo. ¿O nadie se enteró que en los últimos cuarenta años generamos una pobreza del cincuenta por ciento, que la economía en negro es el cincuenta por ciento? Mientras tanto, nadie se pregunta quiénes somos los responsables.
Nuestros gobernantes están recorriendo el mundo de rodillas porque somos deudores consuetudinarios, pero vivimos como reyes. Somos Isidoritos.
Señores empresarios: con el respeto que me merecen, reúnanse, hablen de la Patria y por ende de sus intereses. ¿Quién mejor que ustedes que saben lo que es sufrir los desatinos de nuestros gobernantes de los últimos cuarenta años?
Señores empresarios: deben ser activos participantes de la política, deben ser candidatos. La Patria se los demanda.
Cuando hablamos de la Patria -palabra que ningún discurso de la diplomacia de las buenas costumbres pronuncia-, deberíamos tener en cuenta a nuestros abuelos y padres que forjaron esta Patria que alegremente estamos fundiendo.