Está próximo el cierre de las listas para la Reforma de la Constitución provincial. Todos podremos participar. El voto, como corresponde, será obligatorio. Las listas que se ofertan para el voto popular tienen varias características especiales.
Hay una máxima del fútbol profesional que se considera virtuosa. Acaso no lo sea al ciento, tal vez todo equipo pueda mejorarse, pero aparece como una frase cercana al dogma político y, de hecho, en el fútbol, donde hay que sumar cábalas, supersticiones y caprichos, el asunto es un tema sin repreguntas: "Equipo que gana no se toca"...
Está próximo el cierre de las listas para la Reforma de la Constitución provincial. Todos podremos participar. El voto, como corresponde, será obligatorio. Las listas que se ofertan para el voto popular tienen varias características especiales.
Desde la fórmula "duetos o binomios de género", esto es, uno de cada padrón respetando la alternancia y fallando, en la Justicia Electoral, según corresponda y recordemos: así, en 2023 un diputado, primero del listado, no entró y su compañerita de lista sí, porque sumaban a un colectivo y correspondía mujer.
Agreguemos la particularidad que, para la Reforma de la Constitución, se respeta la territorialidad con el esquema que otorga al senado la misma representación departamental, sin importar el número de habitantes: uno, uno solo para representar el Departamento Rosario y uno solo el Departamento 9 de Julio.
Esa protección que presta, que sostiene, a la que obliga la bicameralidad, al uso de los votos en provincia y nación para las senadurías es difícil, muy difícil de explicar a los cronistas porteños que preguntan porque razón en una Reforma de la Constitución Provincial también se preserva el territorio con 19 constituyentes que son, a todas luces, diferenciados por sus electores como si, esa es la duda razonable, como si existiese la sospecha que habría desequilibrios si una simple pluralidad de sufragios resolviese el lugar de los 69, ni uno más. Ni uno menos.
Es cuanto menos particular el peso específico de los votos departamentales en una reforma que aplica a todos.
Parecería a medida de la existencia de los gobiernos y como defensa del avasallamiento de las mayorías que conformarán los votos que se buscan en el Gran Rosario y el Gran Santa Fe o mejor: Región Rosario versus Región Santa Fe. Esa también será una observación a comprobar cuando el 10 de febrero las listas estén oficializadas…
Los cronistas porteños preguntan sobre tal particularidad porque ésta será la primera lista del año aquí, sobre febrero, en la que los "Milei Brothers" participarán por delegación, claro está, pero en el mismo momento que las otras coaliciones lo hacen y se insiste: no sucedió en 2023 porque así lo ejecutó el Sistema Electoral Nacional…esta vez el Gobierno Nacional, la Nación de los Milei, entienden todos que participará.
¿Lo hará con representantes territoriales, que deberían ser 19 y los directamente populares, que sumarían 50?
Pertenezco a los que tienen curiosidad por saber quiénes serán los representantes (al menos 69, por lo menos 19 distritales y diferentes) y no sólo por sus nombres; también porque será una encuesta inapelable, compartiendo, enfrentando, acompañando a las fuerzas locales. Demasiados gerundios, muchísimos verbos en tránsito.
Ejemplo. Socialistas versus Libertarios. Unos son pocos y hacen mucho barullo (enojan a Casa Rosada, según aseguran). Los otros no tienen número y no se sabe a qué porcentaje llegarán, son los que espantan a la coalición gobernante en Santa Fe… ¡Que incluye a esos socialistas!
¿Cuántos diputados constituyentes tendrá Milei? Si se piensa en "Milei Brothers" y en 2023, con sus votos a presidente, un porcentaje altísimo. Hum. Dudas.
Sobre el cierre del lunes 10 de febrero (sí, ya sé, el cierre es el viernes 7, pero en Santa Fe quien dice viernes a la medianoche dice lunes a primera hora, si de elecciones y listas se trata), se sabrán esas composiciones y lo más importante: cómo juegan los hermanos Milei y de qué modo se comporta la diáspora peronista.
También se sabrá hasta qué punto ese volumen crítico que acompaña a Amalia Granata tiene peso, y con quién, en las listas para algo tan fuerte: Reforma de la Constitución Provincial. Un hecho con incidencia profunda en los próximos veinte años de la provincia. Al menos eso: veinte años. Tal vez más.
Hay una máxima del fútbol profesional que se considera virtuosa. Acaso no lo sea al ciento, tal vez todo equipo pueda mejorarse, pero aparece como una frase cercana al dogma político y, de hecho, en el fútbol, donde hay que sumar cábalas, supersticiones y caprichos, el asunto es un tema sin repreguntas: "Equipo que gana no se toca".
El listado estaría resuelto con la fórmula Maximiliano Pullaro y Gisela Scaglia. Superaron el millón de votos. Pullaro es radical. Scaglia es PRO, apoyada por Patricia Bullrich. Los apoyos pueden cambiar. El éxito de la fórmula es un dato histórico. Queda una segunda línea de señoras muy aseñoradas que exigen un tratamiento diferente.
Primera señora: Clara García es socialista y sostienen quienes manejan la estrategia de la señora para sostenerse a sí mismos, que son los socios más cercanos a Pullaro a quien jaquean desde el Poder Legislativo con 14 diputados y un senador… pero cuidado, el senador departamental es del sector de Pablo Javkin, tal vez el que menos votos aportó a la elección Pullaro. El partido CREO es realmente minoritario.
Segunda señora: Carolina Losada, senadora nacional radical, mediática, cercana a Milei antes que al PRO, pero absolutamente radical todavía. Pertenece a un sector estratégico en las operaciones "intraradicalismo", con alta figuración en la "cadena de sucesiones" en el Senado Nacional.
Tercera señora: María Eugenia Schmuck, la que manejaba el territorio radical en Rosario antes de la Gobernación Pullaro.
Titular del Concejo Municipal de Rosario, la heredera natural de Javkin. Schmuck: con ese nombre se identifica el territorio radical rosarino, que las otras dos señoras no pueden mostrar como propio. El asunto está en encuestas, votos y equilibrios sectoriales… o sea, en discusión permanente.
Hay más señoras y correctísimos caballeros para armar esa enredadera de uno y uno según género. No queda mucho tiempo. El peronismo no sería más la verdadera oposición, ya que no tiene los votos unívocos para oponerse, sino que aparecen al menos tres sectores, uno es el de Omar Perotti (socio de Pullaro que le ha entregado cargos en el gobierno, en este gobierno).
El de Marcelo Lewandowski es el otro sector y tercero el Kirchnerismo, donde habría que reubicar a los "Evita" y los "Cámpora". Dura tarea para sumar votos en las dos vertientes: territoriales (los mencionados 19 privilegiados) y los 50 del voto popular provincial como distrito único.
"El padrón electoral provisorio para el distrito Santa Fe indica que son 2.835.190 los ciudadanos habilitados para votar en los comicios provinciales y nacionales del presente año. Crece en 26.779 en categorías municipales y comunales por la presencia de electores extranjeros autorizados a elegir intendentes, concejales o autoridades comunales".
"Con ese número de electores en el padrón -aún provisorio- en la crucial elección de convencionales constituyentes del 13 de abril próximo en Santa Fe, para llegar a pelear bancas en la futura convención se necesitarán 70.879 votos, el 2,5% de los votos exigidos por la Ley Nº 14384 que declaró la necesidad de la Reforma Constitucional".
La nota del colega Mario Cáffaro permite establecer un número especial: 71.000. Quien consiga esa cantidad de votos en el total provincial del padrón mencionado será Diputado Convencional Constituyente.
Nada parece fácil o difícil, es un juego de números reales sobre el territorio, con algunos escollos inamovibles. Uno la territorialidad tan raramente definida para una Convención Constituyente. Otro la pertenencia partidaria resuelta por el dedo y la lapicera de quien tenga representación partidaria, apoderado y padrón de afiliados.
Tal vez el más profundo de los elementos a considerar: la fórmula de gobernador y vice sumó más de un millón de votos. Fue una elección con diversos partidos que aportaron lo suyo.
En una lista de convencionales nadie piensa en esa cantidad… por diversas razones, pero queda el interrogante: ¿Romper la fórmula daría resultado para una estrategia más ganadora? No me pregunten, soy periodista, soy el que hace las preguntas.
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