Por Augusto Munaro
Por Augusto Munaro
"Excursión", cuarto poemario de la poeta argentina radicada en Nueva York, Silvina López Medin (*), está compuesto por dos partes: "Excursión" y "Obra viva". La primera sección acaso se pueda articular como una historia donde su narración se construye de una forma no lineal. Los poemas numerados, meticulosamente yuxtapuestos, van desarrollando una trama entrecortada en un barco y en una habitación de hotel, donde dos hermanos parecen estar apartados entre el tiempo y el espacio. Distancia que parte y aparta, salvo en la dinámica del verbo. "He recorrido la distancia que va / de la palabra al cuerpo". Una voz que avanza arrastrando una imagen fija en el tiempo. El lector se descubre regresando a ella en varios momentos, desde distintos puntos de vista, para construir las escenas de la forma más completa posible. Tiempo, espacio, distancia; hay una morosidad, casi litúrgica en su precisión, el modo en que las imágenes se van elaborando: "¿cómo se empuja / el eje de una historia?", se pregunta López Medin. Y la poeta lo hace desplegándola, acaso, como mapa de distancias, entre cuerpos separados. Estos poemas-escenas progresan siguiendo una pulsión quebrada muy particular, es decir, guiándose por el roce de las cosas, las cosas que no encastran: los desencuentros. Así, por momentos, surgen preguntas que parecen tragarlo todo, hundiéndose en la palabra, como naufragio (y refugio) de los sentimientos sutiles.
El complemento del libro, "Obra viva", en cambio, consta de poemas, titulados y no numerados. Muchas de estas piezas conservan un sesgo narrativo pero con la huella indeleble del tono lírico. Glosan situaciones a través de un lenguaje limpio, aséptico. Su fuerte unidad tonal y temática desnuda un sistema dinámico de leyes perfectamente articuladas, abriendo sensaciones con la gracia de un alumbramiento. López Medin, así establece nuevas significaciones, acaso otras realidades más hondas e incorruptibles, siempre a favor de la flexibilidad analítica del lenguaje. "¿habrá más / agua? / ¿habrá algo / que como un rayo aparte el sonido / de la luz, / nos aparte?" ("Algo que aprender de una tormenta"). La magia de la elipsis.
(*) Silvina López Medin publicó los libros de poemas "La noche de los bueyes" (Madrid, Visor, 1999), Premio Internacional de Poesía a la Creación Joven de la Fundación Loewe, "Esa sal en la lengua para decir manglar" (Buenos Aires, del Dock, 2014) y "62 brazadas" (Zindo & Gafuri, 2015). Su obra de teatro "Exactamente bajo el sol" se estrenó en el Teatro del Pueblo y recibió el Tercer Premio de Obras de Teatro del Instituto Nacional del Teatro. Co-tradujo, junto con Mirta Rosenberg, el libro "Eros the Bittersweet" de Anne Carson (Fiordo, 2015) y la antología de poemas "Home Movies de Robert Hass" (Z & G, 2016). Es editora de la sección de traducciones de Washington Square Review, y editora de Ugly Duckling Presse.
Estos poemas-escenas progresan siguiendo una pulsión quebrada muy particular, guiándose por el roce de las cosas, las cosas que no encastran: los desencuentros.
López Medin establece nuevas significaciones, acaso otras realidades más hondas e incorruptibles, siempre a favor de la flexibilidad analítica del lenguaje