La portavoz presidencial aún no respondió la pregunta que se le formuló desde este medio en la última conferencia de prensa que brindó: ¿Qué pasó con el Decreto que equipara los salarios de militares y policías? Sin embargo, según trascendidos, algo de eso habría en agenda para esta semana.
Los ánimos entre quienes visten uniforme militar están por el piso. Por eso, y mostrándose consciente de ello, el Ministro de Defensa dijo el 17 de mayo del 2022 que el personal militar “no puede estar en la situación que está ahora", por lo que se haría un “esfuerzo grande” en el que está “comprometido el Presidente”. Jorge Taiana prometía así una recomposición salarial que coloque a los militares en un nivel no menor que al de las Fuerzas de Seguridad. La famosa equiparación salarial. Volvió a hablar del tema el 25 y 27 de mayo, también recientemente, el 10 de septiembre. El tiempo pasa mientras la inflación hace que el poder adquisitivo de los militares sea aún peor para pagar alimentos, vestimentas, educación, etc. Soñar con un proyecto de vida que incluya casa propia y un auto es prácticamente una utopía para un militar.
Si el Ministro de Defensa prometió la equiparación salarial el 17 de mayo y también el 10 de septiembre, significa que pasó al menos 4 meses prometiendo algo que no cumplió. En julio, los acreditados en Casa Rosada supimos que la intención del oficialismo era dar algún anuncio concreto en la cena de camaradería de las Fuerzas Armadas (a la que asiste el Presidente) y que se realiza normalmente entorno al 9 de julio. Los antecedentes de las últimas dos gestiones indican que, sin embargo, esos encuentros llegaron a dilatarse – cuando se realizaron. Hasta el mes de agosto de los respectivos años. En esta ocasión, octubre está a la vuelta de la esquina pero llegaron indicios de que la cena de camaradería sucederá al cierre del mes: el 29 de septiembre, siendo la Fuerza Aérea Argentina la anfitriona.
Lo que ocurriría el jueves 29, en el Edificio Libertador “General San Martín”, sería el anuncio de un adelantamiento de los acuerdos paritarios previstos hasta los primeros meses del 2023 y la promesa de una pseudo equiparación salarial para el año próximo, de características electorales, a incrementarse en cuatro tramos durante todo el 2023.