La Defensoría del Pueblo manifestó su preocupación por los hechos sucedidos en la ciudad de Santa Fe en los últimos días vinculados con el movimiento generado alrededor del proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo, en tanto que rechazó la violencia en todas sus formas.
Desde la institución señalaron que se ofreció asistencia a las víctimas, y manifestaron que “agresiones como éstas buscan generar miedo, y el miedo es incompatible con la democracia. La libertad de expresión, palabra y pensamiento se encuentran constitucionalmente garantizadas, de manera que resulta inadmisible tolerar episodios de esta naturaleza”.
“Los hechos que tuvieron lugar han sido un avasallamiento a la dignidad de la persona, a su integridad física, al derecho a manifestar sus ideas. No escuchar al otro es no reconocerlo; y agredirlo es intentar negarlo”, afirmaron.
Por otra parte, la defensoría expresó que “en el marco de la Agenda 2030 la institución trabaja de manera permanente para cultivar una cultura de paz; promoviendo la conformación de sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitando el acceso a la justicia para todos y creando instituciones eficaces, responsables e inclusivas en todos los niveles”.
Por último recordaron que “más allá de la instancia judicial, y tal como se realiza habitualmente, el grupo de profesionales que se desempeña en el Centro de Asistencia a la Víctima contiene, informa y asesora a quienes sufren situaciones de violencia y de vulneración de derechos, construyendo respuestas a las necesidades que se presentan. En este espacio se ofrece un abordaje integral interdisciplinario e interinstitucional desde una perspectiva de género y de derechos”.