El nuevo ministro de Educación del Gobierno de Jair Bolsonaro, Carlos Alberto Decotelli, que asumió el cargo el jueves, afirmaba en su currículum que era doctor en Administración por la Facultad de Ciencias Económicas y Estadística de la Universidad Nacional de Rosario, en Argentina. Pero el responsable de todas las políticas educativas brasileñas a partir de ahora, en realidad, suspendió el examen de calificación del tribunal y, por lo tanto, no tiene el diploma del curso. La información fue revelada por el rector de la universidad argentina, Franco Bartolacci, en su cuenta de Twitter. El entonces estudiante “presentó una versión escrita que fue dictaminada desfavorablemente por el jurado; por lo tanto, no pudo pasar a su defensa oral”.
El presidente Bolsonaro presentó el currículum de Decotelli al anunciar su nombramiento. El actual ministro fue publicitado como un perfil técnico, diferente del anterior ocupante de la cartera, Abraham Weintraub, vinculado al ala más ideológica del bolsonarismo. La información sobre el doctorado aparecía en el currículum del ministro y también en varias publicaciones del Gobierno federal sobre el período en que presidió el Fondo Nacional de Desarrollo Educativo, un órgano estatal. El título de la tesis defendida era “Gestión de riesgos en el modelado de los precios de la soja”, y su director era Antônio de Araújo Freitas Júnior, vicerrector de la Fundación Getulio Vargas, una institución privada brasileña. En el currículum de Freitas, no aparece el trabajo del ministro en la lista de tesis doctorales en las que participó. Tampoco se menciona que haya dirigido ningún trabajo en la Universidad Nacional de Rosario. Tras la repercusión del caso, se ha alterado el currículum de Decotelli: ha desaparecido el nombre del director y se aclara que la tesis no se defendió, solo se concluyeron los créditos.
La polémica la desató el propio rector de la universidad argentina. “Nos vemos en la necesidad de aclarar que Carlos Alberto Decotelli da Silva no ha obtenido en la Universidad de Rosario la titulación de doctor que se menciona en esta comunicación”, anunció en Twitter. En respuesta, el Ministerio de Educación refutó la declaración y presentó una copia del certificado en el que la institución confirma que el ministro cursó todas las asignaturas. “El Ministerio de Educación informa que el ministro Carlos Alberto Decotelli da Silva concluyó, en febrero de 2009, todos los créditos del doctorado en Administración por la Facultad de Ciencias Económicas y Estadística de la Universidad Nacional de Rosario, en Argentina”, dice la nota del ministerio.
Al preguntarle sobre el certificado presentado por el ministro, el rector ha sostenido que Decotelli no tiene un doctorado de la universidad que coordina: “Ese certificado confirma lo que hemos dicho. Cursó el doctorado, pero no lo finalizó. Falta aprobar la tesis, que es la instancia final para acceder al título de doctor. Por lo tanto, no es doctor por la UNR”.
Esta no es la primera vez que los ministros del Gobierno de Bolsonaro enfrentan polémicas por inflar sus currículos. El exministro de Educación, Ricardo Vélez, tenía varios “errores” en el suyo, como mostró el medio digital Nexo Jornal. El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, no realizó ningún máster en Derecho público en la Universidad de Yale, un título que se le atribuyó hace años en sus artículos, como reveló The Intercept en Brasil tras entrar en contacto con la institución. El periódico Folha de S. Paulo también mostró que la ministra de Mujeres, Familia y Derechos Humanos, Damares Alves, no tiene ningún “máster en Educación”, como afirmaba en sus discursos.
Tenés que leerEx ministro brasilero sostuvo que alertó a Bolsonaro: "Nada de lo que ocurre hoy es sorpresa"Decotelli asume una de las carteras más importantes del Gobierno federal de Brasil con el desafío de reconstruir los puentes que quemó la gestión caótica de su predecesor, Abraham Weintraub, que dejó el cargo tras llamar “canallas” a los magistrados del Supremo Tribunal Federal y decir que deberían estar “todos en la cárcel”. El descontento del Gobierno de Bolsonaro con la Corte brasileña se produjo después de que se abriera una investigación sobre ataques virtuales contra los magistrados, que se acerca cada vez más a algunos partidarios del presidente. El nuevo ministro es oficial de la reserva de la Marina, donde trabajó como profesor, y es un nombre que gusta a los militares. En su primera entrevista tras ser nombrado para el cargo, Decotelli prometió realizar una gestión técnica.