El joven que hizo de "campana" la tarde del 11 de febrero de 2020 mientras en el interior de la Galería Rivadavia dos de sus cómplices intentaban asaltar al agenciero de turismo Hugo Oldani -y lo herían de muerte- fue condenado este viernes en un juicio abreviado. Se le impuso la pena de 12 años de prisión efectiva, tras considerarlo partícipe secundario del crimen.
Se trata de Brian Nahuel Damiani (23), condenado de manera unánime por los jueces Nicolás Falkenberg, Leandro Lazzarini y Pablo Ruíz Staiger en una audiencia llevada a cabo este viernes en la sala 6 de tribunales. Participaron los fiscales de la Unidad de Homicidios Gonzalo Iglesias y Martín Torres, el querellante Romeo Díaz Duarte (representante de la viuda y una hija de Oldani), y el abogado defensor Ignacio Alfonso Garrone.
Esta es la segunda condena por el crimen, y la primera en el marco de la causa que investiga la justicia santafesina, ya que la otra tramitó en Juzgado de Menores (a Agustina González le impusieron 10 años de prisión en carácter de "coautora"). Además, la sentencia a Damiani se dio a pocos días del segundo aniversario de la muerte del agenciero a manos de Cristian Figueroa, que le disparó con una 9mm luego de que se resistiera a un robo.
Previo al tratamiento del acuerdo abreviado, la fiscalía reimputó el hecho, realizando algunas modificaciones en cuanto a la calificación legal y el grado de participación del campana en el crimen. A su entender, "del análisis de la evidencia reunida, con el rigor que esta instancia amerita, se desprende que no se trató la conducta desplegada por Damiani de una cooperación decisiva o indispensable para que los hechos se desarrollaran del modo en que sucedieron; y tampoco tomó una participación activa y concreta en la ejecución directa del mismo, esto es en el hecho de dar muerte a Oldani. De este modo consideramos que le corresponde y lo correcto es subsumirlo en el carácter de partícipe secundario".
En cuanto a la calificación, que originalmente era "homicidio calificado por el empleo de arma de fuego y criminis causae (por ser cometido para consumar otro delito)" en concurso real con "robo calificado por el empleo de arma de fuego y por haber sido cometido en poblado y en banda", esta sufrió dos modificaciones.
La primera se trató de lo que motivó el agravante criminis causae, que pasa a ser "para procurar su impunidad"; mientras que la segunda se relaciona con el robo, ya que tras el análisis de las evidencias recolectadas la fiscalía señaló que "no se ha podido acreditar la consumación del desapoderamiento", por lo que el delito quedó en grado de "tentativa".
Todas las modificaciones contaron con el visto bueno de la querella, y fueron aceptadas por la defensa.
Damiani realizó una declaración a puertas cerradas en agosto de 2020 -después de pasar cinco meses en prisión preventiva por el crimen- que dio inicio a una nueva línea investigativa y llevó a que el fiscal Iglesias y su colega Ana Laura Gioria ordenaran una serie de allanamientos a finales de ese diciembre.
En estos se detuvo a dos hombres. El relacionista público Andrés Kaipl fue imputado como quien realizó tareas de inteligencia la mañana del hecho y escoltó a la banda esa tarde; permanece en prisión preventiva.
El bioquímico Alfredo Sadonio también se vio involucrado en la investigación a raíz de los dichos del "campana", señalado como quien pasó el dato de dónde debía cometerse el robo. Luego de que Damiani no pudiera reconocerlo en una rueda de personas, Sadonio recuperó su libertad bajo alternativas pero siguió ligado a la causa. En diciembre de 2021, a casi un año de que fuera imputado, solicitó el sobreseimiento en una audiencia que duró cuatro horas y pasó a cuarto intermedio por decisión del juez Octavio Silva. Está previsto que se reanude el 16 de febrero.
Son seis las personas que fueron imputadas por estar directamente relacionadas con el homicidio de Hugo Oldani, cometido el martes 11 de febrero de 2020 a las 18. Una semana después del hecho fueron detenidos tanto el "campana" Damiani -que permaneció en la vereda frente a la Galería Rivadavia mientras ocurría el hecho- como el "chofer" Juan Manuel Ruffino (27) -que condujo el Toyota Corolla blanco en el que los asaltantes arribaron a la esquina de Avenida Rivadavia y La Rioja-. Mientras que el primero ya cumple condena, el segundo continúa en prisión preventiva.
A mediados de marzo de 2020 se logró la detención del "tirador" Cristian Bruno Figueroa, quien ingresó con una pistola 9 mm a la Agencia de Turismo Oldani e intentó robarle al dueño, que se resistió y terminó con una herida de bala que resultaría mortal. El joven se suicidó en septiembre, mientras cumplía la cautelar de máxima en el Penal de Las Flores; su cadáver fue hallado el mediodía del domingo 19 en el interior de una celda de "resguardo" a la que había pedido ser trasladado.
Agustina González, la adolescente que acompañó a Figueroa a asaltar a Oldani y que forcejeó con la víctima cuando ésta se resistió, fue detenida cuatro meses después del hecho, luego de una persecución que atravesó tres barrios de la ciudad de Santa Fe. Debido a que tenía 17 años al momento del crimen, su caso tramitó en la Justicia de Menores. Fue condenada a 10 años de prisión como coautora del crimen y presentó un recurso respecto al monto de la pena; aún espera la resolución de la Cámara de Apelaciones.
En cuanto a los dos detenidos en diciembre de 2020, Andrés Kaipl continúa en prisión preventiva (la medida fue revisada y confirmada en varias oportunidades). Sadonio está en libertad, solicitó el sobreseimiento y aguarda la segunda jornada de dicha audiencia, fijada para la tercera semana de febrero.