Dos hombres de 37 y 39 años de apellido Traico fueron condenados este jueves en los tribunales santafesinos, como miembros de una asociación ilícita conformada para cometer estafas telefónicas bajo la modalidad de "cuento del Tío".
Para recuperar la libertad tuvieron que depositar 16.700 dólares y 40.000 pesos. Además, les decomisaron un auto VW Gol modelo 2020 que pasa a manos del Estado.
Dos hombres de 37 y 39 años de apellido Traico fueron condenados este jueves en los tribunales santafesinos, como miembros de una asociación ilícita conformada para cometer estafas telefónicas bajo la modalidad de "cuento del Tío".
Se trata de Jorge Traico (39) y Esteban Boris Traico (37), quienes pasaron los últimos 15 días tras las rejas, luego de sus detenciones el 6 de abril en sus respectivas viviendas de la ciudad mendocina de Guaymallén.
Desde allí fueron trasladados por efectivos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de Las Colonias, con destino a la ciudad de Santa Fe, para ser imputados ante la justicia local por dos hechos cometidos en enero y marzo de este año en el mencionado departamento.
El 9 de abril fueron imputados por el fiscal Alejandro Benítez, quien les atribuyó su "participación como miembros de una asociación ilícita y la coautoría de estafas y defraudaciones". A la semana siguiente -12 de abril- la jueza penal Sandra Valenti ordenó la prisión preventiva para ambos, tras el acuerdo alcanzado entre la fiscalía y el defensor particular Juan José Patiño.
Este jueves, la causa se cerró con la firma de sendos juicios abreviados y con la sentencia del juez Luis Octavio Silva, quien impuso la pena de tres años de prisión en suspenso para Esteban Boris y Jorge Traico, quienes además, como parte del acuerdo debieron resarcir a las víctimas como condición para recuperar la libertad.
Es decir que como parte del acuerdo, los Traico debieron depositar 16.700 dólares y 40.000 pesos en favor de las víctimas y les fue decomisado un auto Volkswagen Gol modelo 2020 que será destinado para dependencias del Estado.
Según explicó oportunamente la oficina de prensa del Ministerio Público de la Acusación (MPA), los Traico cometieron dos estafas. La primera el viernes 28 de enero, en Esperanza, en perjuicio de un hombre al que despojaron de 40.000 pesos y 1.300 dólares. Y la segunda se concretó el jueves 3 de marzo en Franck, en la cual una mujer les entregó 15.400 dólares.
"Las víctimas recibieron llamados telefónicos de una mujer que se hizo pasar por sus respectivas hijas" y producto de la labor investigativa se supo que "las comunicaciones fueron realizadas desde la ciudad de Guaymallén". Luego, "un hombre que simuló ser un empleado bancario fue a los domicilios de cada una de las víctimas y se apoderó de sus ahorros", resumió el informe fiscal.
Según consta en la carpeta judicial, se trata de una organización criminal se trasladaba por diferentes provincias y seleccionaba víctimas al azar. Con el falso argumento de que los billetes de pesos argentinos con diseños de animales y los dólares de cara chica saldrían de circulación, engañaban a otras personas para que les entregaran dinero en efectivo.