Carlos Retamal
El doble crimen ocurrió en la tarde de este domingo 4 en una calle del barrio Molino Blanco, a metros de avenida Circunvalación. Es el tercer homicidio en la ciudad y el cuarto en el departamento Rosario en los primeros cuatro días del mes de septiembre.
Carlos Retamal
En la tarde del domingo 4 de septiembre, una balacera que pareció interminable sacudió a un sector del barrio Molino Blanco, ubicado en el extremo sur de Rosario, dejando como saldo dos víctimas fatales y elevando a 199 la cantidad de asesinatos registrados en el departamento Rosario en lo que va del año.
Fuentes judiciales y policiales indicaron a este diario que minutos antes de las 17, varios llamados al 911 denunciaron que se habían escuchado una seguidilla de detonaciones de arma de fuego y que al menos dos personas quedaron tendidas sobre pasaje 544 al 6600, a metros de calle Ayacucho y de Juan Pablo II (la colectora de Circunvalación), una zona de casas bajas, que durante mucho tiempo estuvo plagado de viviendas precarias, pero que desde hace más de una década viene siendo intervenida por el estado a través de planes de vivienda, apertura de calles, acciones sociales y con la puesta a punto de una huerta orgánica (llamado parque huerta Molino Blanco).
A los pocos minutos llegaron al lugar varios patrulleros, pero a esa altura, vecinos de la zona los habían cargado en autos y los llevaron a toda velocidad hasta el hospital Roque Sáenz Peña.
Una de las víctimas, identificada como Jonatan Nicolás Schneider, de 31 años, murió a los pocos minutos de ingresar. Mientras que la otra persona herida, Graciela Carrizo, de 58, fue trasladada al hospital de emergencias Clemente Álvarez, donde falleció cerca de las 18.
En base a los primeros indicios y testimonios recogidos en la zona por los investigadores, el ataque se produjo cuando Jonatan Schneider iba en bicicleta junto a un familiar y pasaron al menos dos personas en bicicleta que, al parecer sin advertencia ni palabras previas, comenzaron a disparar. El hombre de 31 años recibió varios impactos y quedó tendido sobre la calle, mientras que su acompañante logró huir y en principio no recibió ningún disparo.
La otra víctima, Graciela Carrizo, estaba en una plazoleta ubicada a muy pocos metros, en compañía de familiares, y recibió dos proyectiles de arma de fuego, uno en la zona del cuello y el restante en el cráneo.
El fiscal en turno de la Unidad de Homicidios Dolosos, Gastón Ávila, ordenó al gabinete criminalístico y a la división homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) que lleven a cabo distintas pericias, entre ellas una inspección ocular de la zona del hecho, croquis demostrativo, levantamiento de rastros, pericias fotográficas y toma de testimonios a vecinos de la zona y familiares de las víctimas que puedan aportar datos.
En la zona del ataque se encontraron 15 vainas calibre 9 milímetros, que fueron enviadas a peritar. También se revisó si hay cámaras de seguridad en inmediaciones del lugar que puedan aportar imágenes de los autores del brutal ataque.
Ambos cuerpos fueron trasladados al Instituto Médico Legal (IML) para ser sometidos a autopsia.
Es el tercer homicidio que se registra en la ciudad y el cuarto en el departamento Rosario en los primeros cuatro días del mes de septiembre. En total, ya se llevan registrados 199 en lo que va del año en el departamento.