"El milagro de la vida": la emotiva tarea de fotografiar el nacimiento
Una serie de entrevistas con trabajadores que sobresalen del común denominador, por talento, por experiencia, por unicidad. En esta séptima entrega, un reportaje que toca las emociones más profundas de una familia, sobre todo de la mujer que se corona como madre. Los sentimientos compartidos entre quien da a luz y quien lo retrata.
El álbum de la vida. Dalmasso retrata el momento exacto del nacimiento. Crédito: Fernando Nicola
No debe haber en la vida de una mujer algo más importante que el nacimiento de su hijo. Desde la confirmación del embarazo, pasando por los nueve meses de gestación, hasta el instante preciso del parto. Momentos únicos que cada madre se llevará en su retina. También pueden quedar retratados a partir del encomiable trabajo de quienes se encargan de fotografiar ese increíble instante. El Litoral dialogó con Nora Dalmasso, fotógrafa de nacimientos, quien contó los secretos de una profesión tan emotiva.
“Siempre digo que en cada nacimiento hay un renacer”, arranca la entrevistada y deja en claro: “No puedo separar el lugar mío de mamá, lo que yo sentí como madre. Tuve las dos experiencias, la de parto natural y la cesárea, entonces las entiendo porque yo lo viví”.
Al ser consultada por cómo se inició en esta rama de la fotografía, Dalmasso contó: “Soñaba con poder lanzar un nuevo proyecto, que era para poder recordar en el tiempo lo que es el momento del nacimiento. Desde que soy mamá es el mejor estado. Poder lograrlo, es maravilloso”.
—¿Cómo son tus trabajos?, consultó El Litoral.
— Mis registros de nacimiento son tal cual suceden. Es un documental del momento. Hago un registro de nacimiento, cuando el bebé nace y tiene sus primeros contactos con su mamá. Mi trabajo sigue hasta que el papá sale con su bebé en brazos o salen los tres hacia la habitación. Uno de mis sellos es cuando le saco la foto al papá de espaldas, que va con su hijo en brazos. Es la primera fotografía del padre y el niño que sale al mundo.
La fotógrafa en plena selección de su material. Crédito: Fernando Nicola
Imágenes íntimas
Por obvias razones, los registros de Dalmasso están previamente consensuados con la familia que la contrató para tal fin, por tratarse de imágenes de la intimidad. Así lo destaca la fotógrafa: “Casi el 95 por ciento de los trabajos que entrego me pasa que me dicen ‘uy no sabía que había pasado esto’ o ‘no recordaba aquello’. Hay momentos que ellas no lo ven, como cuando está naciendo el bebé. Algunas mamás me piden que haga esa foto de cuando está naciendo su hijo, que son imágenes totalmente cuidadas y privadas”.
En otro tramo del reportaje, la protagonista trajo a colación un trabajo por el que fue premiada. “Lo recibí por una foto de un bebé que nació y estaba dentro de su bolsa todavía. Eran mellizas, la primera fue una cesárea y mientras estaban haciendo la recepción de la segunda, empezó a salir de la bolsa. Una de las ginecólogas lo único que hizo fue ponerle su mano y la terminó de sacar. Por eso la foto se llama ‘El milagro de la vida en tus manos’”, reconoció.
Sobre ese único momento, Dalmasso recordó: “Ese día cuando ví que estaba sucediendo, sinceramente no lo podía creer. Cuando sentís que estás logrando la foto que soñaste y ves que tus colegas de otros países lo hacen y sentís que no lo vas a lograr. La emoción fue tal que llegué a casa y bajé las fotos automáticamente.
"En cada nacimiento hay un renacer", aseguró la entrevistada quien charló con El Litoral. Crédito: Fernando Nicola
El valor de una imagen
Ante la pregunta, Dalmasso se reconoce como “la primera fotógrafa argentina que ha logrado trabajar con el paso de los años con una autorización”.
En ese sentido, la entrevistada remarcó que no es un hobbie, ni mucho menos algo esporádico. “No es algo que hago cada tanto, es mi trabajo diario, como lo son los fotógrafos sociales”, señaló.
En ese sentido, agregó: “Trato de dejar lo mejor de mí. Y la devolución de cada familia, de cada mamá. Siento que doy un poquito más de mí. Esto lo hago con amor, siento pasión por este trabajo. Es maravilloso”.
Para finalizar, la protagonista reflexionó: “Siempre les digo ‘si no me contratan no importa, que lo hagan con celulares’, porque la foto tiene valor. Tenemos registros de todos los momentos de la vida y no del nacimiento. Qué más importante que el comienzo de la vida; decir ‘mirá cómo te esperamos, cómo nos emocionamos, mirá el amor con el que te mirábamos’”.
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