Domingo 10.1.2021
/Última actualización 7:17
“¿Por qué queremos encerrarlo todo en nosotros? ¿Por qué queremos que todo nos pertenezca? ¿Por qué no dejar la flor en el bosque en vez de arrancarla por una razón egoísta?”. Estos son algunos de los versos que aparecen plasmados en el nuevo poemario, el sexto, concebido por el escritor y cineasta Osvaldo Cristian Huja. Titulado “Balada del triste otario”, el volumen fue escrito durante la pandemia de Covid19, en particular durante la etapa más álgida del aislamiento social preventivo y obligatorio dispuesto por las autoridades. Un contexto que sobrevuela los versos, aun cuando los mismos hablan de diversas temáticas.
“Había empezado el año 2020 con una obra pre-pandemia llamada ‘Bocanadas a la deriva’ y lo cerré con esta otra que se podría catalogar como obra pandémica. Es una especie de libro complementario al anterior”, explicó el autor. En la misma línea, remarcó que el proceso de escritura resultó diferente a otros por la circunstancia del aislamiento. “Incluso hay un poema que reflexiona sobre el impacto que tuvo el virus y se refiere a que la ausencia del hombre es un hecho purificador del planeta. Cuando se produjeron las restricciones más fuertes, hubo animales que empezaron a salir en lugares en los cuales no se los veía y una mayor claridad en el agua de Venecia. Es un reflejo del lugar adonde vamos, de lo que provocamos con nuestras acciones. El planeta podría estar mejor sin nosotros. Es una oportunidad para tomar conciencia, eso sería lo positivo dentro de lo negativo del contexto”, explicó.
D.R.Hay un hilo conductor en todos los textos contenidos en el libro, que es aportado por el propio título del libro, que responde a uno de los poemas, que dice en uno de sus tramos: “Roto como el papel escrito en tu silencio, como la madrugada abriéndose en su sangre, como el árbol deseando ser puente y debatiendo con el viento”. Pero más allá de eso se trata de creaciones muy diversas. “Algunas de ellas reflexionan sobre la cuarentena, otras hablan de cierto estado personal y están las que se refieren al aislamiento”, indicó Huja. En términos estilísticos, se trata de versos libres, que no tienen una característica estructural homogénea.
Osvaldo admite que la poesía es un género relegado. “En general es poco valorado y hasta invisibilizado por el hecho de que hay otras formas de expresión artística que están sobreexpuestas. Y la poesía, más allá de es algo que nunca va a morir porque es parte de la esencia humana, está un poco ensombrecido”, apuntó. No obstante, desde su faceta de escritor sigue apostando a ella.
Además de escribir, Huja desarrolla trabajos vinculados con la realización audiovisual. De hecho, tiene en carpeta la realización de un largometraje, para lo cual está evaluando algunos posibles guiones. “Aún no tiene nombre porque estoy barajando varios, ultimando detalles”, comentó. A su vez, hace algún tiempo produjo un corto animado que se titula “Quedará, quedará, pero el último pasará”, que está disponible en la plataforma Cine.Ar y describe la carrera por el desierto de una serie de personajes de piedra que se ven sorprendidos por una tormenta que los destruye antes de llegar a la meta. También tiene en carpeta la concreción de un libro de autoayuda y también trabaja en el desarrollo de cuentos cortos.
D.R.Osvaldo Cristian Huja es escritor y cineasta santafesino. Cursó dos años de letras en la UNL, es egresado del Instituto Santafesino de Cine y Artes Audiovisuales (Iscaa). Publicó poemarios y participó de un libro anexado a diversos autores hispanoamericanos. Ganó diversos concursos de arte en video. Está enfocado en “la cultura como verdadero crecimiento de un pueblo y en el arte como la expresión más legítima de las inquietudes humanas”.
Un poema sobre la cuarentena
Dentro del volumen “Balada del triste otario”, Huja concibió un poema en el que se refiere a directamente a la instancia de la cuarentena más severa, que se impuso en el país desde fines de marzo durante varias semanas. El texto es el siguiente:
“Te imagino fusionando / lo eterno con lo mágico / formateándote en silencio imaginando un gran cambio.
Mientras tanto en las calles / tiqueteras semáforos / se preguntan demasiado / ¿dónde estamos? / extrañando / y también se lo pregunta el aire acostumbrado / a vivir contaminado.
Pero no se lo preguntan / los océanos o el cielo / tampoco bosques sagrados / porque nuestros sueños siguen habitando.
Se sienten a salvo / sabiendo que nuestros sueños / son inofensivos incapaces de hacerles daño. Te imagino fusionando / con lo eterno lo mágico / formateándote en silencio / imaginando un gran cambio.