Unidades antiaéreas en Kiev trabajaron para interceptar drones que atacaron la capital ucraniana en la madrugada de este miércoles, según informaron el alcalde Vitali Klitschko y oficiales militares.
Los restos de los drones con los que se realizaron el ataque cayeron en tres distritos, sin causar heridos.
Unidades antiaéreas en Kiev trabajaron para interceptar drones que atacaron la capital ucraniana en la madrugada de este miércoles, según informaron el alcalde Vitali Klitschko y oficiales militares.
Los restos de los drones cayeron en tres distritos, pero afortunadamente no causaron heridos. El distrito de Solomianskyi, ubicado en el centro de la ciudad, sufrió daños en un edificio no residencial.
Además, hubo escombros y un árbol incendiado en el distrito de Svyatoshyn al oeste, y en el distrito de Holosiivskyi, cerca del centro de la ciudad, un parque infantil y un edificio no residencial fueron afectados, aunque no se reportaron heridos. Las autoridades y servicios de emergencia estuvieron presentes para atender la situación.
Un equipo de expertos internacionales ha informado que un gran número de prisioneros recluidos en centros de detención improvisados en el sur de Ucrania, ocupado por Rusia, han sido sometidos a torturas y violaciones sexuales.
El Equipo de Justicia Móvil, colaborando con fiscales ucranianos, ha estado investigando crímenes de guerra en la región de Jersón tras su recuperación en noviembre, después de más de ocho meses bajo control ruso.
Las autoridades ucranianas están examinando más de 97,000 denuncias de crímenes de guerra y han presentado cargos contra 220 sospechosos ante los tribunales nacionales. Se ha señalado que los responsables de alto nivel podrían enfrentar juicios en la Corte Penal Internacional, donde se solicitó la detención del presidente ruso, Vladimir Putin.
El informe del Mobile Justice Team, financiado por Reino Unido, la Unión Europea y Estados Unidos, analizó 320 casos y testimonios de testigos en 35 localidades de la región de Jersón. Según el informe, el 43% de las víctimas mencionó prácticas de tortura y violencia sexual como tácticas habituales impuestas por los guardias rusos en los centros de detención.
Las técnicas de tortura más utilizadas incluían asfixia, ahogamiento simulado, palizas y amenazas de violación. El Ministerio de Defensa ruso no ha respondido de inmediato a las solicitudes de comentarios sobre las conclusiones del informe.
En junio, los fiscales ucranianos presentaron su primer caso sobre la supuesta deportación de decenas de huérfanos de Jersón, acusando a un político ruso y a dos presuntos colaboradores ucranianos de crímenes de guerra.