El papa Francisco dijo hoy que debemos expresar con comportamientos en vida nuestro compromiso con “los sacramentos que hemos recibido”, como el Bautismo que “nos hace hijos de Dios y la Eucaristía que nos une a Cristo”.
El pontífice argentino se asomó a la ventana del estudio del Palacio Apostólico Vaticano para recitar el Regina Coeli ante una abarrotada Plaza de San Pedro, donde se habían concentrado un gran número de fieles y peregrinos, muchos de ellos latinoamericanos.
En italiano y antes del Regina Coeli, Francisco felicitó las Pascuas a todos y les agradeció su presencia “para compartir la alegría de la Pascua, el misterio central de nuestra fe”.
“Que la fuerza de la Resurrección de Cristo pueda alcanzar a cada persona -especialmente a las que sufren- y a todas las situaciones necesitadas de confianza y esperanza”, pidió.
Cristo ha vencido el mal en un modo completo y definitivo, “pero nos corresponde a nosotros dar la bienvenida a esta victoria en nuestras vidas y en la realidad concreta de la historia y la sociedad”, dijo.
Si el Bautismo nos hace hijos de Dios y la Eucaristía nos une a Cristo, debe reflejarse en las actitudes, comportamientos y acciones, sostuvo Bergoglio.
Para el Obispo de Roma, la gracia contenida en los Sacramentos pascuales “es un potencial de renovación enorme para la existencia personal, para la vida de las familias y para las relaciones sociales”.
“Pero -subrayó- todo ello pasa por el corazón del hombre; si me dejo alcanzar por la gracia de Cristo resucitado, si le permito cambiarme en aquel aspecto mío que no es bueno, que puede hacer daño a mí y a los otros, yo permito a la victoria de Cristo que se afirme en mi vida, para ampliar su acción beneficiosa”.
“Este es el poder de la gracia -subrayó- y sin la gracia no podemos hacer nada. Y con la gracia del Bautismo y la Santa Comunión puede convertirse en un instrumento de la misericordia de Dios”.
El papa Francisco abundó “en la alegría de ser instrumentos de la gracia de Cristo, como sarmientos de la vid que es Cristo mismo, inspirado en la savia de su Espíritu”.
Y mantuvo que el Misterio pascual puede transformarnos y hacer que el odio deje paso al amor, la mentira a la verdad, la venganza al perdón y la tristeza a la alegría.
El papa se despidió deseando “Buenas Pascuas” a todos y también un “buen almuerzo” entre los aplausos de los asistentes a los que no se dirigió en ninguna otra lengua como era costumbre en sus predecesores, que los hacían en al menos ocho idiomas.
Francisco visitará esta tarde de forma privada las excavaciones de la necrópolis vaticana situada bajo la Basílica de San Pedro y orará ante la tumba de San Pedro, informó hoy la sala de prensa vaticana.
El papa estará acompañado por el cardenal Comastri, arcipreste de la Basílica Vaticana y la hora de la visita no ha sido concretada.
La tumba de san Pedro se encuentra en la Grutas Vaticanas, bajo el altar papal de la Basílica de San Pedro y fue Pablo VI quien anunció en 1968 que las reliquias del santo habían sido descubiertas en un complejo funerario.
EFE