En una elección clave para el armado político de la oposición, el diputado provincial Maximiliano Abad se encaminaba esta noche a convertirse en el nuevo presidente de la UCR bonaerense al imponerse sobre el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
La agrupación oficialista se impone al frente liderado por Posse y apoyado por Lousteau en la provincia de Buenos Aires.
En una elección clave para el armado político de la oposición, el diputado provincial Maximiliano Abad se encaminaba esta noche a convertirse en el nuevo presidente de la UCR bonaerense al imponerse sobre el intendente de San Isidro, Gustavo Posse.
El último dato oficial emitido poco antes de la medianoche indicó que, con los resultados 91 municipios cargados, sobre 67.290 votantes, la lista "Adelante Buenos Aires" de Abad cosechó el 55,88% (37.452 votos) mientras que "Protagonismo Radical", la lista de Posse, obtuvo el 44,12% (29.567 votos).
En ese contexto, el sector de Abad, candidato del oficialismo partidario y de dirigentes nacionales como el diputado Mario Negri, los gobernadores Gerardo Morales y Gustavo Valdés y el referente Ernesto Sanz, festejaron, aunque el candidato mostró cautela.
De hecho, Negri felicitó como ganador a Abad bastante temprano y dijo: "Han defendido un proyecto colectivo y han vencido a las aventuras personalistas. La UCR está en marcha para tener candidatos a gobernadores y a presidente y para fortalecer Juntos por el Cambio".
Por su parte, el intendente de San isidro, respaldado por el senador Martín Lousteau y dirigentes históricos como Enrique "Coti" Nosiglia y Federico Storani entre otros, consideró que se dio "un empate técnico".
En la misma línea, fuentes del entorno de Lousteau indicaron a NA que para ellos el radicalismo bonaerense quedó parejo en representación.
Posse se impuso con claridad en la tercera sección electoral y buena parte del Gran Buenos Aires, con victorias en Lomas de Zamora, Esteban Echeverría, Pilar, Morón, Hurlingham y Vicente López, además de San Isidro, y obtuvo importantes triunfos en distritos del interior como Exaltación de la Cruz y Junín.
Como Posse en San Isidro, Abad hizo valer su localía en General Pueyrredón y sacó una ventaja holgada en el Partido de la Costa, a la vez que ganó en distritos como Lobos, Lincoln, González Chaves, General Villegas, Castelli y Carmen de Patagones, y sorprendió en el conurbano con victorias en Almirante Brown y Avellaneda.
Además de definir la nueva conducción, la UCR bonaerense eligió a los delegados al Comité Nacional del partido, que deberán votar en diciembre al nuevo presidente, y a la Convención Nacional, encargada de avalar la política de alianzas y, por lo tanto, un órgano clave para 2023.
Si bien ambos sectores en que el radicalismo se mantenga dentro de Juntos por el Cambio, difieren en la táctica con la cual se sentarán a la mesa de negociaciones con el PRO y por ello la conducción nacional del partido y las mayorías y minorías en la Convención podrían ser determinantes.
Mientras que el ala de Posse y Lousteau acusa a la conducción actual de haber sido "sumisa y servil" con el PRO durante los cuatro años de gobierno de Juntos por el Cambio, Abad, Negri y Morales destacan que el radicalismo fue ganando lugares que no tenía en legislaturas, intendencias y provincias de todo el país.
Además, mientras Posse impulsa a Lousteau como candidato presidencial para 2023 -aunque el senador mantiene la mira en la Ciudad de Buenos Aires- del lado de Abad amaga con correr la carrera por la Casa Rosada Gerardo Morales, mientras que varios se esperanzan con la figura de Facundo Manes, cuyo hermano Gastón fue en la lista de convencionales de Abad.
Ninguno de los dos sectores hace críticas altisonantes al PRO (de hecho, Posse aseguró a NA que no tiene "reproches" al partido amarillo, sino a la conducción radical) pero el ala bonaerense con de esa fuerza política, con María Eugenia Vidal a la cabeza, tiene más afinidad con Abad, jefe de los diputados provinciales de Juntos por el Cambio.
Con información de NA.