Martes 18.5.2021
/Última actualización 6:02
En mayo del año pasado, poco después de declarada la pandemia por el nuevo coronavirus, se inició en el país un ensayo clínico para evaluar la efectividad del uso de plasma de pacientes recuperados en el tratamiento de personas enfermas de Covid-19. Fue en un momento en que no existían tratamientos específicos contra una afección prácticamente desconocida, ni vacunas; pero se contaba con el dato a favor de su aplicación en otras enfermedades como la Fiebre hemorrágica argentina y la Gripe H1N1.
Un año después, el programa sigue adelante con resultados que por ahora no son definitivos. "Todavía hacen falta más estudios, lo que tenemos son protocolos de investigación", dice Alejandra Vellicce, jefa del Departamento de Hemoterapia del Hospital de Clínicas, una de las primeras instituciones que se sumó al ensayo impulsado en 2020 por el Ministerio de Salud de la Nación.
Con ella dialogamos hace un año y retomamos el contacto ahora, en medio de una segunda ola que tiene características bien distintas: los contagios son más rápidos, afectan a personas más jóvenes que requieren internación en terapia por un plazo más prolongado.
Tan distinta es esta segunda ola que "el año pasado 7 de cada 10 personas tenían anticuerpos suficientes como para poder donar plasma, y este año solo uno de 20 cuenta con ese nivel de anticuerpos". "Por eso -destaca Vellicce- es importante que la mayor cantidad de personas concurran para ser evaluadas ya que la cantidad de donantes aptos (para donar) disminuyó mucho este año".
Es que uno de los requisitos es medir la cantidad de anticuerpos que tienen los donantes y que deben ser "bastante altos". De ese dato va a depender "que tengan anticuerpos neutralizantes que son los que van a tener mayor efectividad contra el virus y van a evitar las complicaciones respiratorias".
Para comprender esta conclusión, conviene empezar por describir cómo es el proceso para donar plasma con fines terapéuticos.
Puede ser donante toda persona recuperada de Covid-19 que no haya estado internada en terapia intensiva; debe tener entre 18 y 65 años de edad que es el mismo requisito que rige para donar sangre.
Como en otras instituciones, la persona se contacta vía correo electrónico (ver Dónde consultar), donde debe responder algunas preguntas; si califica para donar plasma se le hace una entrevista telefónica y se asigna un turno para concurrir al hospital o al centro de salud que corresponde para aportar una muestra de sangre; a partir de ésta se hace el dosaje de anticuerpos. "Este dato es importante porque, en el caso que tenga un valor alto de anticuerpos va a poder donar plasma; en el caso que tenga un valor bajo no va a ser posible".
Archivo/ Flavio Raina En efectores de salud de la provincia, incluidos el Cullen y el Iturraspe de nuestra ciudad, se realiza la extracción de plasma de pacientes recuperados. En la página web del Cudaio se encuentra toda la información disponible.En efectores de salud de la provincia, incluidos el Cullen y el Iturraspe de nuestra ciudad, se realiza la extracción de plasma de pacientes recuperados. En la página web del Cudaio se encuentra toda la información disponible. Foto: Archivo/ Flavio Raina
"El objetivo -explica la profesional- es cuidar tanto a las personas que donan como a quienes van a recibir su plasma".
Hay más requisitos que aplican para donar plasma: "Las mujeres que hayan tenido un embarazo o un aborto tampoco pueden donar; este antecedente es muy importante ya que con los embarazos se forman anticuerpos que pueden estar presentes en el plasma y generar una respuesta inflamatoria grave a nivel pulmonar".
"También estamos trabajando en un protocolo de control de anticuerpos pos vacunación; concurrieron a controlarse pacientes que son a la vez personal del hospital, que habían recibido plasma y todos querían donar porque sabían la gravedad de la enfermedad y querían ayudar a las personas que estaban en su misma situación. Así que para nosotros fue una grata sorpresa que las personas que habían recibido plasma luego quieran ser donantes".
Por otro lado, "toda persona que haya recibido una transfusión, en este caso plasma, para poder donar va a tener que esperar un año".
- ¿Quiénes pueden recibir plasma?
- Por Boletín Oficial del Ministerio de Salud de la Nación existe una recomendación que es el uso apropiado de plasma de pacientes recuperados de Covid-19 con fines terapéuticos. Las recomendaciones son que lo reciban pacientes mayores de 75 años con menos de 72 horas de iniciados los síntomas y con diagnóstico confirmado de Covid. Por eso es muy importante que las personas que haya estado en contacto estrecho con otra que tiene Covid realice los controles y, si tiene síntomas, tiene que concurrir a un hospital o centro de salud cercano a su domicilio para ser evaluado. Estos momentos son claves para que los pacientes puedan recibir tratamiento lo antes posible y de esa forma disminuir la gravedad del cuadro y la posible complicación.
Además tiene otras recomendaciones: no administrar plasma de convaleciente en pacientes con más de tres días de iniciados los síntomas con diagnóstico confirmado de Covid y que presenten condiciones particulares de frecuencia respiratoria y saturación de oxígeno.
La breve tregua que ofreció el nuevo coronavirus durante los meses de verano permitió evaluar y analizar datos, además de mantener un stock de plasma apto para ser transfundido a pacientes que lo pudieran requerir. Pero, en Santa Fe, la tarea del Centro Único de Ablación e Implantes de Órganos (Cudaio) estuvo lejos de detenerse.
Así lo confirma Andrea Acosta. del Área de Hemoterapia del Cudaio, en diálogo con este diario. "En diciembre de 2020, una vez que había pasado la primera etapa de la pandemia, se reunieron distintas asociaciones para evaluar la situación ya que habían sido presentados dos ensayos a nivel nacional, uno era el trabajo del Hospital Italiano y otro de la Fundación Infant". Así fue como, junto con la Asociación de Hemoterapia Argentina, el Gsiamt, la Dirección Nacional de Sangre y coordinadores provinciales, volcamos los resultados (parciales) que habíamos obtenido por provincia y se delinearon nuevas sugerencias para trabajar en el uso experimental de plasma de pacientes recuperados de Covid".
Dentro de esas conclusiones, se definió a quienes serían pacientes receptores de plasma: personas con diagnóstico de la enfermedad, una edad de entre 70 y 75 años como mínimo, que no presenten una enfermedad respiratoria grave o una neumonía grave, y tratar de aplicarlo antes de los 5 días del diagnóstico. "La sugerencia nacional es antes de los 3 días del diagnóstico de la enfermedad pero nosotros consideramos que con cinco días estamos dentro de las indicaciones a nivel nacional e internacional".
En cuanto a donantes, siempre hubo personas interesadas en participar del ensayo, explicó la profesional. Por eso las extracciones continuaron aún en el período de menos demanda de tratamiento, no solo en Santa Fe sino también en Rosario, Venado Tuerto, Rafaela y Reconquista.
"Para nosotros el trabajo siguió", y ahora -mientras el país atraviesa una segunda ola de contagios. "volvemos a ponerle intensidad y requerimos que la gente se acerque a donar plasma para que tengamos dosis suficientes para todos", expuso Acosta quien afirmó que en pacientes que reunían las características antes mencionadas "quedó demostrado que el uso de plasma tuvo una disminución de la mortalidad".
- El Centro Único de Ablación e Implante de Órganos depende del Ministerio de Salud de la Provincia: www.cudaio.gob.ar.
- Hospital de Clínicas José de San Martín (dependiente de la Universidad de Buenos Aires): plasmacovid@hospitaldeclinicas.uba.ar
Juliana Torres se desempeña en la Guardia Covid y no Covid del Hospital de Clínicas (que depende de la UBA). El año pasado se enfermó de Covid, estuvo 13 días internada y recibió dos unidades de plasma. Este es su testimonio que incluye, además, una recomendación.
"Tuve Covid a principios de septiembre del año pasado. No tuve síntomas dentro de los 'normales', pero si dolor corporal y cansancio. Me revisaron, me hisoparon y el resultado dio positivo. Estaba en mi casa cursando la enfermedad, y empecé a levantar fiebre, tuve problemas respiratorios y una noche me desperté y no aguantaba el dolor en el pecho. Me asusté, agarré mis cosas y me fui al hospital. Ahí empecé con disnea y me internaron; primero en observación. Me bajaba la saturación (de oxígeno), me quedaba sin aire.
"Estuve 13 días en el hospital con dificultades respiratorias, con mucha fiebre y no mejoraba; entonces me pusieron la primera dosis de plasma y no sentí los cambios. Unos días después, llegó la segunda y ahí si empecé a mejorar. Al poco tiempo me dieron el alta.
"Creo que el plasma me ayudó porque de ahí iba a terapia; no había más opciones. No puedo donar plasma aunque quise hacerlo porque sentí que me ayudó y quería devolver lo que había recibido".
"Ahora que ya salí estoy muy sensible, valoro más la salud por encima del resto de las cosas: a veces una se propone metas que en realidad no son tan significativas y después de una experiencia así se da vuelta toda la idea de lo que querés en la vida. Quizá valoro estar más en mi casa y disfrutar el tiempo con mi familia.
- ¿Qué le dirías a las personas que se resisten a cuidarse?
- Que se cuiden mucho porque cada cuerpo es diferente y esta enfermedad no afecta a todos de la misma manera: en algunas personas es leve pero en otras es fuerte y no es una experiencia linda de pasar. Hay que seguir con los cuidados mínimos: mantener la distancia, usar el barbijo y, si no hay más remedio que estar con otras personas, tomar los recaudos porque uno no sabe a quién le puede tocar y es necesario evitar que se llegue a la instancia más complicada.