Cuarenta y ocho horas después del 36 aniversario del golpe cívico-militar del 24 de marzo de 1976, el dictador Jorge Rafael Videla escuchaba esta mañana como el abogado Alan Iud, por las "Abuelas de Plaza de Mayo", comenzaba su alegato y lo responsabilizaba, entre otros, por el plan sistemático para el robo de bebés durante la dictadura.
Con la mirada perdida y junto a su camarada de armas y también dictador Reynaldo Benito Bignone, ambos se sentaron frente a los integrantes del Tribunal Oral en lo Federal 6 luego que los efectivos del Servicio Penitenciario les quitasen las esposas.
Eran exactamente las 10:18 cuando la camarista María del Carmen Roqueta dio "por concluida la etapa probatoria" y anunció que sería el momento de comenzar con los alegatos, otorgando la palabra, en primer término, a Alan Iud, abogado de Abuelas de Plaza de Mayo.
A escasos metros, sentada junto a Iud, estaba Estela Carlotto quien, momentos antes de la audiencia, había anticipado a Télam que albergaba un "espíritu de satisfacción" por haber llegado a la etapa final del juicio.
Videla y Bignone, a quienes la titular de Abuelas calificó como "genocidas y depredadores, peor que los animales porque todavía reivindican sus crímenes" escuchaban el alegato del abogado procurando evitar cruzar las miradas y preferían fijar sus ojos en las paredes tapizadas de la sala de audiencias.
Fuente: Télam