Por Carlos Retamal
Su defensa había solicitado la prisión domiciliaria, pero la Cámara Penal de Rosario decidió que continúe tras las rejas. Si lo autorizó a ser trasladado a fin de mes, por 48 horas, a un sanatorio privado donde será operado.
Por Carlos Retamal
La Cámara Penal de Rosario confirmó este miércoles 16 de junio la prisión preventiva efectiva para Germán Schoeller, el hombre de 36 años que, hace casi tres meses, corrió una picada en la zona sur e impactó un vehículo en el que viajaba una familia, matando casi en forma instantánea a un padre y su hijo. La defensa había pedido la morigeración de la prisión preventiva efectiva a prisión domiciliaria.
En la misma resolución, el juez de 2ª Instancia, Gustavo Salvador, autorizó que dentro de dos semanas, Schoeller sea trasladado a un sanatorio privado, donde será intervenido quirúrgicamente por una de las lesiones ocasionadas durante la carrera mortal. Según se especificó en la audiencia, el traslado será por 48 horas, y en el tiempo que permanezca en el nosocomio, deberá estar bajo custodia y con prisión preventiva efectiva.
El hecho ocurrió alrededor de las 00.05 del 20 de marzo pasado, en la zona de avenida del Rosario y Ayacucho, en la zona sur de Rosario, cuando Schoeller, se dirigía a bordo de un automóvil Renault Sandero, por avenida del Rosario, en sentido de circulación este-oeste, a una velocidad inusitada de 132 kilómetros por hora, realizando una prueba de velocidad y destreza con otro automóvil marca Citroën C4, conducido por Pablo Mancini.
Al llegar a la intersección con Ayacucho, con el semáforo en intermitente rojo, impactó contra un vehículo Citroën C3, haciendo que éste realice un giro, despidiendo partes de la carrocería, que quedó sobre el asfalto y la vereda.
Como consecuencia del impacto, los dos conductores, Schoeller y Mancini, “provocan el fallecimiento de las víctimas Valentino Pizorno de 8 años y de David Pizorno de 42 años y las lesiones graves por politraumatismos de Cintia D.”, pareja del mayor de los fallecidos y madre del niño, señalaron en su momento los fiscales de la Unidad de Homicidios Culposos Valeria Piazza Iglesias y Walter Jurado.
Cabe recordar que ambos conductores fueron imputados por separado, ya que quien iba al volante del Renault Sandero sufrió varias lesiones por las cuales estuvo internado en cuidados intensivos de un sanatorio privado.
El conductor del C4 fue imputado en la semana posterior a la mortal colisión, por homicidio simple con dolo eventual; mientras que su amigo, quien iba al mando del Renault Sandero, recibió la misma calificación legal, que tiene una pena en expectativa de entre ocho y 25 años de cárcel.
Para ambos, los fiscales pidieron la prisión preventiva efectiva sin plazos, pedido que fue aceptado por el juez de primera instancia Facundo Becerra. Si bien la pena no está contemplada en el Código Penal, hay jurisprudencia que podría ser utilizada para este caso, remarcaron en su momento fuentes del caso.