Domingo 30.5.2021
/Última actualización 14:33
Un millonario robo de colmenas perpetrado a mediados de mes contra un productor apícola en el departamento santafesino de Castellanos fue esclarecido por personal de la Dirección General de Seguridad Rural "Los Pumas" de la policía provincial, recuperando la totalidad del botín que ya fue restituido a su propietario.
Según pudo saberse, el audaz y planificado golpe fue perpetrado en un campo de la zona rural de Colonia Bicha, una pequeña población. Allí, delincuentes llegaron en algún tipo de vehículo y se llevaron cien panales que un emprendedor apícola cordobés tenía en el lugar.
La víctima, de 33 años y domiciliada en la localidad de Brinkman, en la provincia mediterránea, radicó la denuncia en la Sección N° 5 de Sunchales de Los Pumas.
El viernes, las fuerzas de seguridad del ámbito rural, lograron la detención de los autores del ilícito, secuestrando 88 cámaras de cría en una vivienda de la localidad de Eusebia, una camioneta Ford F100 blanca y un carro.
Más luego, durante el sábado 29, los uniformados dieron con el resto del material faltante que se encontraba en un apiario ubicado en un camino perdido, a unos 7 kilómetros al sur de dicha localidad, recuperando 12 alzas inferiores con tapa y piso, el material vivo (abejas) y los cuadros con cera.
El damnificado participó del operativo, identificando el material inerte.
Como se sabe el ilícito se produjo en la zona rural de Colonia Bicha donde desconocidos se alzaron con 100 colmenas.
Tareas investigativas posteriores permitieron dar con el paradero de 88 cajones que no contenían las abejas ni los cuadros con cera. Se encontraban en una vivienda de la localidad de Eusebia, donde estaban siendo adulteradas, masillando el sector donde se encuentra el número identificatorio de RENAPA, procediendo a pintarlas de nuevo.
El "pintor" señaló a un vecino de Sunchales al hablar de quien le había dado los "cajones" para pintar.
Así las cosas los dos involucrados en la maniobra terminaron presos, acusados de robo calificado por el fiscal Nicolás Stegmayer, que también ordenó el secuestro del vehículo que presuntamente se utilizó para el traslado de las colmenas, una camioneta Ford F-100.