Tras romper rejas y ventanas, varios delincuentes robaron gran cantidad de objetos y dinero. La policía detuvo a dos hermanos, quienes previamente habían asaltado a una mujer en la calle.
Varios delincuentes protagonizaron el domingo una verdadera tarde de furia en San José de Rincón, en una secuencia que incluyó un arrebato callejero y manoseo contra una mujer, el robo en una propiedad privada y finalmente la detención de dos hermanos.
La secuencia se inició en horas de la siesta cuando un ladrón interceptó a una mujer en plena calle e intentó robarle su teléfono celular. Como la víctima resistió el atraco, se originó un forcejeo que derivó en un intento de abuso del que por fortuna la joven salió airosa.
Poco después un grupo de malvivientes atacaron una vivienda ubicada en Milicias Rinconeras al 1900, esto es, a cinco cuadras de la calle principal del pueblo.
Tras cortar el cerco perimetral los intrusos luego arrancaron una reja y violentaron una ventana que les permitió el acceso a la propiedad. Una vez adentro causaron un gran desorden y sustrajeron un TV color de 29 pulgadas marca LG; una notebook; una motoguadaña a explosión; bicicletas; herramientas, objetos personales y algo de dinero en efectivo.
Personal policial que se encontraba abocado a la búsqueda por el robo callejero advirtió que algo anormal estaba ocurriendo en el domicilio mencionado por lo que decidió ir a chequear.
Pero la aparición de los agentes también fue captada por los malvivientes que se dieron a la fuga, rompiendo otra ventana de la casa y corriendo por un patio hasta ganar la calle.
Lo que siguió fue una persecución que culminó con la detención de dos de los ladrones, que resultaron ser dos hermanos; uno de 22 años y el otro de 14.
"Yo soy un residente relativamente nuevo. Hace tres meses que estoy acá, y en ese lapso ya me robaron dos veces. Lo mismo le ha ocurrido a otros vecinos. Sin dudas que hay una ola delictiva", dijo Sebastián (47), el dueño de la finca asaltada, en diálogo con El Litoral.
"En marzo me entraron y me llevaron la bomba de agua y ahora me pasa esto. La verdad que uno ya no sabe qué hacer para protegerse. Vine acá pensando que era un lugar tranquilo, pero está claro que me equivoqué", sentenció.