El 15 de junio de 2021, una sorpresiva y no autorizada transacción bancaria alteró la tranquilidad de D.N.D. en la ciudad de Venado Tuerto, quien descubrió que la suma de $80,000 había sido sustraída de su cuenta sueldo. Inmediatamente después de notar el faltante, contactó a la identidad bancaria donde cobra sus haberes por medio de su línea 0810 y procedió a enviar un correo electrónico para informar sobre el incidente.
Sin obtener una respuesta satisfactoria tras presentarse personalmente en la sucursal al día siguiente, D.N.D., con el asesoramiento legal del representante de Usuarios y Consumidores Unidos de Venado Tuerto (UCU), el doctor José María Conzoli, decidió iniciar acciones legales. El objetivo era declarar nula la transferencia realizada sin su consentimiento y buscar reparación por daños morales y punitivos.
Vigilancia y reparación
“El caso avanzó a la justicia y D.N.D. logró obtener una sentencia favorable en primera instancia, un veredicto que posteriormente fue apelado por la entidad bancaria. Sin embargo, la Cámara de Apelaciones desestimó los agravios presentados por la entidad bancaria y confirmó la decisión inicial, reforzando la posición de D.N.D.”, informaron desde la ONG.
El dato es que hoy, D.N.D., está a punto de recibir una compensación superior a los $2 millones, marcando un precedente importante en la protección de los derechos del consumidor frente a errores o actos ilícitos de instituciones financieras.
“Este caso no solo subraya la importancia de la vigilancia sobre las transacciones bancarias por parte de los ciudadanos sino que también demuestra el poder de la justicia para corregir los agravios y ofrecer un resarcimiento justo. Desde nuestro despacho, estamos listos para asesorar y acompañar a aquellos que enfrenten situaciones similares y necesiten defender sus derechos ante el sistema financiero”, remarcaron desde la ONG.