Por Ricardo Porta
Aún están a tiempo, y ese es el regalo que Dios le está dando al pueblo rojiblanco, pero hay que despertar ya.
Por Ricardo Porta
A mediados de marzo de 1976, y frente a la gravedad de las circunstancias, Ricardo Balbín, como líder de la oposición, se dirige al país por la cadena nacional de radio y televisión: "Algunos suponen que yo he venido a dar soluciones y no las tengo. Pero la hay. La unión de los argentinos para el futuro de los argentinos". Y parafraseando a Almafuerte concluyó: "Todos los incurables tienen cura cinco minutos antes de su muerte".
Por favor, que alguien le avise al Presidente de Unión y su CD que Unión se está yendo a la B. Desciende. Pierde el privilegio que significa jugar en la máxima categoría del fútbol de los Campeones del Mundo. Significa lo que todos sabemos, lo que cuesta luego ascender.
La historia al carajo. Los hitos logrados hechos trizas. Las participaciones en Copas Internacionales al olvido, lisa y llanamente. Despierten. Abran las ventanas y reconozcan el fracaso. Tengan la humildad de los pobres. Catorce años de gobierno y siguen con pelotudeces, dedicándose a cuestiones secundarias mientras siguen inhibidos por no pagar a un modesto club uruguayo por la transferencia de Mele. Esa deuda es un vuelto en relación a las ventas realizadas. No se equivoquen de enemigos. Dejen la soberbia. Hay en la ciudad ejemplos de cómo terminaron los soberbios y mentirosos. ¿O me equivoco?.
Lo vimos todo al partido ante Arsenal. Jugaban a ver quién era el peor.
Pero, ¿saben una cosa?: aún están a tiempo. Y ese es el regalo que Dios le está dando al pueblo rojiblanco: Pero hay que despertar ya…se lo suplico. Estoy en éste mismo momento interpretando el sentir de todos los "tatengues" de verdad.
Unión es demasiado grande y no tiene lugar para gente caprichosa.
Hagan honor al título de su querido Club: UNIÓN. Dejen intereses personales de lado por una vez y salven a ésta centenaria institución.
Que Dios los ilumine.