"El lunes fue un día de incertidumbre total donde la gran mayoría de los proveedores habían suspendido las ventas y estaban suspendidas también las listas de precios". Así empieza Martín Salemi, presidente del Centro Comercial de Santa Fe, a desandar los acontecimientos de la última semana, luego de la renuncia del ministro de Economía de la Nación Martín Guzmán, el sábado de principios de julio por la tarde.
No es ocioso mencionar la fecha: julio es fecha de pago del sueldo anual complementario. "A medida que pasaron las horas los comercios tenían que seguir vendiendo ante la cercanía del pago de aguinaldo; algunos optaron por retocar los precios un 10 o un 15 % en función de los movimientos que había sufrido el dólar el lunes".
Desde la institución se hizo un relevamiento rubro por rubro de las actividades más afectadas por la incerteza que significa no tener precios de referencia ni medidas económicas concretas. "En materiales de construcción se está trabajando con la cadena de pagos cortada; no se tiene mercadería; lo poco que hay se vende pero no se permiten acopios".
"En artículos de electricidad ya se venían registrando algunos incrementos en lo importado y lo nacional", continuó.
En indumentaria, "ya se está comprando la mercadería de verano que siempre va con lista de precios abierta: el precio se va a saber cuando empiece a llegar la mercadería".
El balance arroja una "situación de intranquilidad: Venimos plantando que hay que esperar que pasen las horas y los días para ver cómo se van desarrollando las nuevas medidas que tome el gobierno nacional. Pero necesitamos una claridad a la hora de trabajar porque toda esta incertidumbre hace que el comerciante no tenga una proyección".
A julio sigue agosto y con él llega otro hito importante para el comercio: el Día de las Infancias, y "en vez de estar preocupados por vender, lo estamos por el precio al que se va a reponer la mercadería".