Sábado 30.10.2021
/Última actualización 17:19
Calles de arena, árboles, mucho verde y siempre, de fondo, la melodía afinada de la naturaleza. Todo eso se ve y se escucha a medida que salimos de la Ruta Provincial N° 1 y nos internamos hacia el corazón de San José del Rincón, a la esencia misma de esta ciudad que mantiene un nexo estrecho con la capital santafesina pero que hace mucho dejó de ser "un barrio más" de la gran urbe.
En ese marco, el intendente Silvio González (Frente Progresista, Cívico y Social) elige recibir a El Litoral para conversar, largo y tendido, sobre la gestión que arrancó en diciembre de 2017 y anticipar los planes y propuestas para un segundo mandato, si la voluntad popular lo acompaña en las urnas el próximo 14 de noviembre.
González habla de lo hecho e imagina lo que queda por hacer en este momento bisagra que significa la tregua de la pandemia por Covid-19 y que significa una clara oportunidad para "reconstruir lazos y vínculos sociales", más allá de las obras y de los programas de gobierno.
"Tenemos que entender de dónde venimos para saber adónde vamos", dice González citando una conocida frase a la que adhiere y, a la vez, le permite enumerar los cambios logrados durante su gestión, a la que llegó con la herencia de "paros, deudas y desorden en los registros del mandato anterior". Todo eso requirió "una organización interna que abarcó expedientes, personal y recursos económicos para sanear deudas y normalizar la situación administrativa".
Eso en lo que respecta a la tarea puertas adentro del municipio. A la hora de describir el trabajo puertas afuera no duda en comenzar por la acción social, para él una prioridad que se materializa tanto en la atención alimentaria a 500 personas como en la regularización dominial, con la entrega de escrituras (el día antes de esta charla había concretado diez), y la atención puesta sobre tres barrios vulnerables de la ciudad. "Desarrollo social, producción y turismo son los tres ejes sobre los que se trabaja fuerte y se proyecta todavía más", define.
Los temas de Género componen otra de las políticas "que llegaron para quedarse", con la creación de una Dirección y una Guardia que facilita el acceso de las víctimas a una denuncia, sin dudas el primer paso para comenzar a romper el círculo de la violencia en cualquiera de sus expresiones.
El Polo Social y Productivo, que desde agosto lleva el nombre del Ing. Miguel Lifschitz (ex gobernador, fallecido en mayo) es una de las obras que lo muestran más orgulloso. Allí conviven el Refugio de la Imaginación, el Comedor Comunitario, el playón deportivo y la primera Plaza de la Mujer, inaugurada en 2019.
Sobre el tercer tópico de su racconto, el turismo, el mismo paisaje habla por si solo, pero también la historia y la cultura que se revela en los nombres que se inspiraron en la geografía rinconera para escribir, componer y filmar.
De esa mixtura entre la tradición de sus fiestas típicas y patronales, y las novedades de los temas que se sumaron a la agenda, género y medio ambiente, por ejemplo, habla González mientras aclara que "si antes estos temas no estaban incorporados era porque no estaban las herramientas para que sean abordados desde el Estado".
Dicho de otra forma, "entiendo que nuestras políticas generaron condiciones para que la comunidad se vaya abriendo y pueda canalizar situaciones angustiosas, que se develan ahora y que llevan más de diez años acalladas". Pero "los cambios se dan progresivamente; de eso se trata nuestro gobierno: de ser progresista", sostiene el intendente y candidato.
-Sin dudas, este es un momento bisagra en el mundo y también en el país y la provincia, cuando estamos saliendo del momento más complicado de la pandemia y, en el caso particular del país y de Santa Fe, desembocamos en una elección. ¿Lo analiza como una oportunidad?
-Estamos atravesando una normalidad diferente y de resiliencia. Acuerdo en que es una oportunidad también para replantearnos cuestiones que atraviesan al mundo: el consumismo, el individualismo, el egoísmo. La pandemia nos ha movido de nuestra zona de confort y, como todo cambio, genera incertidumbre y tensión pero también la oportunidad de salir de una manera diferente. "Si querés que las cosas cambien, dejá de hacerlas de la misma manera", dice el dicho. Y este es el desafío que hoy tiene el mundo.
-En su caso, ¿cuál cree que puede ser esa oportunidad?
-La reconstrucción de lazos y vínculos sociales. Estamos atravesados por un flagelo muy grande como es el consumo problemático que es producto de una sociedad que se ha ido degradando en su integralidad, y ha perdido la ocupación de los espacios públicos como hacíamos 40 años atrás. Esto se contradice con nuestra mirada progresista en términos de la concepción de la familia, no la tradicional, sino como un espacio de diálogo, escucha y respeto.
Si hay algo en lo que quisiera poner el eje, más allá de las obras y la proyección del desarrollo de la ciudad, es en recuperar todas esas condiciones que hicieron de Rincón una ciudad tranquila, de belleza natural donde la gente venía a descansar y disfrutar. El desafío de rinconeros y rinconeras, como también de quienes eligieron venir a vivir a Rincón, es trabajar en forma articulada con un Estado presente para que siga siendo una ciudad cuidada y protegida, donde podamos seguir disfrutando y viviendo en paz. Y que todo lo que se haga en materia de obras y ordenamiento de la ciudad sea atravesado por este concepto.
Mientras tanto, la Ruta 1, "donde falta respeto de automovilistas por semáforos y límites de velocidad" -advierte- acerca, comunica e integra. "Creo en la integración regional que no significa perder la identidad porque los límites políticos existen. Ahí está la imaginación, la inventiva y la capacidad de la gente y del Estado para articular preservando todo lo que nos hace diferentes".
El 14 de noviembre serán las elecciones generales y, como se dijo, González va por un segundo mandato con el Frente Progresista. "Creo que la gente va a valorar que ésta es la gestión más transparente, la que tiene un municipio ordenado y saneado, lo cual no es menor. Alguien podría decir que esa es la tarea de todos pero no es lo que sucedió en Rincón. No tenemos ni una denuncia, ni una sola sospecha de actos de corrupción en nuestro gobierno, que es el único que cumplió con su palabra en la gestión. Nosotros llamamos a una auditoría y, hoy, hay un intendente procesado", apunta.
"La gente me conoce desde hace 25 años como médico, como vecino y ahora como intendente. Sabe del valor que tiene para mi la palabra: hemos cumplido y honrado esa palabra con acciones concretas", argumenta González y aporta: "Tengo experiencia en la gestión; no me encuentro en este lugar por casualidad. Y además me acompaña un equipo porque no concibo el trabajo si no es en equipo y este, a su vez, articulando con la comunidad".