-¿Cuál era el punto de quiebre entre Vilas y Clerc?, ¿por qué no se hablaban?
El santafesino también admite que "soy más feliz ahora que cuando jugaba, porque cuando jugaba lo único que tenía en la cabeza era una pelota de tenis".
-¿Cuál era el punto de quiebre entre Vilas y Clerc?, ¿por qué no se hablaban?
-Porque a Clerc lo odiaron porque una vez dijo que no a la Davis... Vilas decía: "Es muy bueno, pero no jugó la Davis"... ¿te acordás que una vez fue un militar a buscarlo a Chile a Batata?... Le costó un montón salir de todo eso... Todo el tiempo así... Y bueno, en ese dobles, aquella vez, enfrentaron a McEnroe-Fleming, la mejor pareja y en la cancha que mejor jugaban... Lo que no entiendo es por qué en el quinto set empezó sacando Vilas... El que saca primero, saca último... Debió empezar Batata...
-¿Cuál era el mejor?, ¿Vilas?
-¡No...! Clerc tenía un tenis sensacional, el mejor revés del mundo paralelo, lo "cagó a palos" a todos con ese golpe... A todo el mundo le gustaba más el tenis de Clerc... Vilas era todo esfuerzo... La pelota de Clerc venía rapidísimo...
-¿Cuesta mucho "armar" un jugador de elite?
-Mirá, en Inglaterra pasaron muchos años para que salga un Murray... España es el mejor junto con Argentina... Francia lo tuvo a Noah y no sé quién más vino... La camada que tuvo Argentina en un momento, no es normal... No es normal que haya tres entre los mejores 10 del mundo... Lo que nadie entiende es cómo salen tantos jugadores en este país... Tengo un periodista amigo mexicano, que sabe muchísimo y siempre me pregunta lo mismo... Yo creo que el argentino sabe mucho de tenis... Hay que reunir como 800 condiciones, mentales, físicas, técnicas... Schwartzman, la Podoroska... Hay un chico de Humboldt que viene bien, Giulano Furlotti... Siempre salen, sin presupuesto y sin torneos... Es muy difícil armar un torneo de 10.000 dólares para que estos chicos puedan competir acá.
-¿Pusiste mucho dinero para jugar?
-Al principio, seguramente mi viejo puso... Pero a los 14 años ya me pagaba todo la Asociación... Mirá, Schwartzman tiene dos sponsors y sin ellos no hubiese podido seguir... A Vilas, Tiriac le sacaba el 50 por ciento pero le conseguía todo... Muchos creen que te hacés millonario enseguida, con Noah nos acordábamos de un partido en el que una volea, sólo una volea, permitía ganar 600 dólares... Y era mucha plata en ese momento para nosotros... ¡Hasta nos acordamos del resultado del último set: 12-10!... Podoroska, en el 2019, debe haber gastado 100 mil dólares, iba de un continente a otro, perdía en primera rueda y seguía... ¡Qué cabeza!... En Roland Garrós te sacan el 33 por ciento de lo que ganás... No te creas que cualquiera gana mucho dinero.
-Siempre me llamó la atención que un tenista juegue un partido de cinco horas, que se recupere y que al día siguiente o a los dos días vuelva a jugar otro partido igual...
-Son todos piques cortos, se entrena para eso... En mi época jugábamos 4 o 5 sets a la mañana y la seguíamos a la tarde... Hoy es difícil hacer eso con los chicos... Pero se mejoró mucho con el gimnasio, te lesionás menos... ¡Hasta en los torneos hay gimnasio!... En mi época se decía que hacer pesas, endurecía... Yo me exigía mucho... Cuando era número 1 de menores de 15, era 2 de menores de 18... A lo mejor no era bueno tanta exageración... Mi tío de Buenos Aires, donde paraba, era siquiatra y una vez le dijo a mi mamá: "A este chico lo van a destruir"... Pero bueno, Vilas era una roca, Clerc también...
-Pero era lo que querías...
-¡Yo tenía una pelota de tenis en la cabeza!.... Pensaba demasiado en el tenis... Soy mucho más feliz ahora que cuando jugaba... Si vos te ponés a ver, ningún jugador estaba contento cuando jugaba... No creo que Sabatini haya disfrutado, ni Gaudio, nadie... Es una vida solitaria, ahora se viaja con el equipo, antes no y se sufría mucho... ¡Yo me fui a vivir a Buenos Aires a los 16 años!... Pero ganar un partido era lo mejor del mundo.
-¿Qué soñaste y no alcanzaste?
-Y... haber sido el 1, porque yo entrenaba pensando que era para ser el 1 del mundo... Pero bueno, uno se da cuenta que hay otros (risas)... No es bueno el que gana todo, es bueno que se acostumbre a la derrota...
-¿Y con ser famoso?
-¡Capaz que ni se me ocurría!... O sí... Yo venía de una época en la que el tenis no era tan famoso... El boom fue cuando Vilas ganó el Abierto de EEUU en el 77, Casabianca ganó en juveniles y nosotros la Copa Galea... Ese fue el comienzo, todo el mismo año... Yo le pegaba a la pelota con "top spin" como él, pero ni sabía... No entendía lo que podía llegar a ser la fama... Después, me dí cuenta de que puede ser peor de lo que uno piensa... No me gustaría haber vivido lo de esos tipos que no pueden ni salir a la calle... Debe ser horrible...
-¿A quién te gustaría volver a tener enfrente tuyo para darle un abrazo?
-¡A mi padre...! Yo no estuve tanto con él, porque a los 16 ya me iba a Buenos Aires... Siempre me apoyó... Mirá, yo estuve cuatro años entrenando en Italia y mi viejo se murió un mes antes de que vuelva... Me hubiese gustado que mis hijos estuvieran más tiempo con él. Los conoció, porque fue a Europa a visitarnos... Yo me fui a Italia cuando Celia, mi mujer, que me ayudó muchísimo, estaba embarazada de uno de mis dos hijos... Se las arregló muy bien en todo, los crió más ella que yo... Hoy, uno es ingeniero en sistemas y el otro es licenciado.
-La última, ¿quién es Fernando Dalla Fontana?
-¡Qué pregunta...! Un tipo agradecido a la familia, agradecido del tenis porque conocí a mucha gente, un tipo al que el tenis le inculcó valores de buen comportamiento adentro y afuera de la cancha, a ser responsable, llevar una vida normal, simple, no ostentosa. Un tipo al que quiero que le digan a mis hijos que me recuerdan a mí por lo buena persona más que por lo bien que jugaba...