Por qué no está funcionando el tren Rosario - Cañada de Gómez
Este servicio, que retomó su actividad en 2022 después de 45 años de inactividad, conecta Rosario con Funes, Roldán, San Jerónimo Sud, Carcarañá, Correa y Cañada de Gómez, transportando alrededor de ocho mil pasajeros mensuales.
Por qué no está funcionando el tren Rosario - Cañada de Gómez
El tren que conecta Rosario con Cañada de Gómez permanece fuera de servicio desde el 15 de noviembre, marcando la interrupción más prolongada desde su reinauguración en 2022. La falta de certezas sobre su reactivación preocupa tanto a usuarios como a trabajadores, quienes temen por la continuidad de este transporte clave para la región.
Este servicio, que retomó su actividad en 2022 después de 45 años de inactividad, conecta Rosario con Funes, Roldán, San Jerónimo Sud, Carcarañá, Correa y Cañada de Gómez, transportando alrededor de ocho mil pasajeros mensuales. Sin embargo, los problemas de mantenimiento en locomotoras y vías han llevado a reiteradas suspensiones a lo largo del año.
Según el informe a la información que accedió El Litoral, las locomotoras que prestan servicio enfrentan desperfectos frecuentes. La falta de un taller ferroviario en Rosario obliga a trasladarlas a Buenos Aires para su reparación, un proceso que se ve agravado por la escasez de repuestos. Esta situación fue determinante tras el daño sufrido hace tres semanas, cuando una formación colisionó con un vehículo y quedó fuera de servicio.
“El problema no es nuevo”, advirtió Mariano Antenore, referente de la organización Amigos del Riel. “La falta de mantenimiento del material ferroviario es un mal que arrastramos desde hace años y que afecta a diferentes administraciones”, agregó. En Rosario Norte, según informó, hay vagones y locomotoras en estado de abandono, incluyendo unidades adquiridas en 2013.
Desde diciembre pasado, la suspensión del servicio se ha vuelto una constante, alimentando la preocupación por la posible desaparición del tren. Según Antenore, “no lo van a eliminar por decreto como en los años ’90, pero la falta de inversión lo deja caer por su propio peso”. Este abandono también afecta al personal ferroviario, que trabaja con recursos mínimos y sostiene el servicio con esfuerzo.
La situación también refleja una crisis en el Ferrocarril Mitre, del cual depende este servicio regional. “Los problemas técnicos son recurrentes en toda la flota. Sin inversión en repuestos y mantenimiento, las interrupciones seguirán siendo la norma”, explicó el referente.
En declaraciones anteriores, Antenore había destacado la importancia de este tren como un servicio público esencial. “Es necesario que se destinen recursos económicos y humanos para revertir esta situación. Hay un desinterés manifiesto de las autoridades, mientras el personal pone el pecho para que el tren siga funcionando”, subrayó.
La organización Amigos del Riel también ha advertido sobre el impacto social y económico de la suspensión. Este tren no solo conecta localidades clave del departamento Iriondo, sino que también representa una alternativa accesible y sostenible para miles de pasajeros
En agosto, Antenore había expresado que “la decadencia del servicio es una consecuencia directa de la falta de inversión”. Su preocupación, compartida por usuarios y trabajadores, se centra en evitar que este transporte vuelva a quedar en el olvido.
La reactivación del tren Rosario-Cañada de Gómez requiere un compromiso político que priorice la inversión en infraestructura ferroviaria. Como servicio esencial, su continuidad no solo beneficia a las localidades que conecta, sino que también fortalece el desarrollo regional.
Por ahora, el futuro del tren sigue siendo incierto. Sin un plan claro de mantenimiento y financiamiento, el temor de su desaparición se hace cada vez más palpable. Usuarios, trabajadores y organizaciones como Amigos del Riel continúan exigiendo respuestas para evitar que la historia del abandono ferroviario vuelva a repetirse.