Con menos de cien días en funciones, el primer ministro francés Michel Barnier cayó este miércoles tras votarse en la Asamblea Nacional una moción de censura. Un total de 331 diputados se pronunció este miércoles a favor de la moción de censura, la primera que prospera desde 1962, cuando Georges Pompidou fue cesado por el Parlamento.
La decisión del legislativo refrendada por la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP) y apoyada por el partido de extrema derecha Agrupación Nacional (AN) superó la mayoría absoluta de 288 votos.
Se espera que Barnier entregue su renuncia al presidente Emmanuel Macron en las próximas horas, aunque podría mantenerse como primer ministro interino hasta que el mandatario escoja a su reemplazo.
Barnier, de 73 años, quien fue nombrado primer ministro el pasado 5 de septiembre, desató un terremoto político en el país el lunes cuando activó el polémico artículo 49.3 de la Constitución francesa para aprobar sin votación su plan presupuestario de la Seguridad Social para el próximo año, esquivando así el bloqueo del Parlamento.
La impopular decisión generó una lluvia de críticas de los partidos de la oposición. Desde La Francia Insumisa (LFI), su portavoz, Mathilde Panot, acusó al Gobierno de crear un "caos político" y cuestionó su legitimidad tras los resultados de las elecciones legislativas, en las que el bloque izquierdista Nuevo Frente Popular fue el más votado.
El diputado Éric Coquerel, al defender la moción impulsada por Nuevo Frente Popular (NFP), dijo que "hoy votamos la censura de su gobierno, pero sobre todo marcamos el fin de un mandato: el del presidente".