Cientos de miles de manifestantes salieron este domingo a las calles de la ciudad de Tel Aviv para reclamar al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, un alto el fuego en Gaza que permita la liberación de unos cien rehenes, en manos de la organización palestina Hamás.
Varios llevaban banderas israelíes y se colocaron seis ataúdes en un escenario para conmemorar a los rehenes muertos.
Los manifestantes también bloquearon una autopista central en Tel Aviv, mientras que la gente también salió a la calle en otras ciudades israelíes, indicó el sitio Actualidad DW.
El reclamo al gobierno es que acepte rápidamente un acuerdo de alto el fuego que garantice la liberación del alrededor de un centenar de rehenes que quedan retenidos en Gaza por Hamás, considerado una organización terrorista tanto por Israel como por otros países, incluidos Alemania o Estados Unidos.
Las negociaciones indirectas sobre un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás, mediadas por Egipto, Estados Unidos y Qatar, permanecían estancadas desde hace más un mes.
La central sindical israelí Histadrut convocó a una huelga general el lunes para aumentar la presión sobre el gobierno de Netanyahu para que consiga un acuerdo sobre los rehenes.
"Si mi Gobierno no hace todo lo que esté en su mano para traer a los rehenes de vuelta, aunque eso signifique pagar un precio muy elevado, no creo que este país pueda seguir existiendo", expresó una manifestante llamada Tal Horowitz, de 45 años.
Cadáveres de seis rehenes
El Ejército de Israel había anunciado el domingo que recuperó los cadáveres de seis rehenes de un túnel subterráneo en el área de Rafah, sur de la Franja de Gaza.
Dichas víctimas pertenecían al grupo de rehenes que tomó el grupo Hamas durante el ataque del pasado 7 de octubre.
Los cuerpos encontrados pertenecen a cuatro hombres y dos mujeres. Han sido identificados como Carmel Gat, Eden Yerushalmi, el estadounidense-israelí Hersh Goldberg-Polin, Alexander Lobanov, Almog Sarusi y Ori Danino.
De esta manera, ahora son 97 las personas que siguen cautivas, de los 251 secuestrados. De ellos, al menos 33 están confirmados muertos.
El primer ministro Benjamin Netanyahu fue contundente tras conocerse la triste noticia: "Quien mata rehenes no quiere un trato (de alto el fuego)".
"Nosotros, por nuestra parte, no cejamos. El Gobierno israelí está comprometido, y yo lo estoy personalmente, a seguir luchando por un acuerdo que devuelva a todos nuestros secuestrados y garantice nuestra seguridad y existencia", agregó en un video que posteó en las redes sociales.
Y completó: "Los perseguiremos, los atraparemos y ajustaremos cuentas", añadió Netanyahu, dejando claro que Israel no cederá en su lucha contra el terrorismo que amenaza la seguridad del país.