Qué son las microagresiones en el trabajo y cómo contrarrestarlas
Las microagresiones en el trabajo son actitudes y comentarios sutiles pero perjudiciales que impactan negativamente en los empleados. Gestos de respeto y aprecio pequeños pueden contrarrestar este efecto y crear un entorno laboral más inclusivo y productivo.
Qué son las microagresiones en el trabajo y cómo contrarrestarlas
En el entorno laboral, las relaciones entre colegas pueden estar influenciadas por actitudes y comportamientos sutiles pero poderosos conocidos como "microagresiones". Estas manifestaciones de prejuicios y discriminación, aunque aparentemente insignificantes, pueden tener un impacto devastador en el bienestar de los empleados, su sentido de pertenencia y su rendimiento profesional.
¿Qué son las Microagresiones?
Las microagresiones son comentarios, acciones o actitudes indirectas y sutiles que denigran o discriminan a personas de grupos minoritarios en función de su raza, género, religión, orientación sexual, discapacidad, entre otros aspectos. A menudo, las personas que cometen microagresiones no son conscientes del daño que causan, lo que las hace especialmente perjudiciales para el bienestar emocional y la productividad de los afectados.
El Harvard Business Review aseguró que evitar cometer microagresiones no es suficiente; para remediar el daño que causan, necesitamos contrarrestarlos a través de microvalidaciones. "No es suficiente simplemente eliminar las interacciones negativas, también debemos fomentar las positivas".
Comentarios sobre la apariencia física: Hacer comentarios sobre el aspecto físico de un colega, como su peso, color de piel, cabello, entre otros. Por ejemplo, decirle a alguien de piel oscura que "debe pasar mucho tiempo al sol" o hacer un chiste sobre el peso de alguien son comentarios inapropiados que pueden herir y hacer sentir incómodo al empleado.
Estereotipos culturales o raciales: Hacer suposiciones o comentarios estereotipados sobre la cultura o raza de un compañero de trabajo puede ser una microagresión. Por ejemplo, asumir que alguien de origen asiático es experto en tecnología o que una mujer negra es agresiva por naturaleza.
Asunciones de género: Hacer comentarios o suposiciones basadas en estereotipos de género puede ser una microagresión. Por ejemplo, esperar que las mujeres tomen roles de cuidado o apoyo en lugar de puestos de liderazgo o cuestionar la capacidad de un hombre para manejar responsabilidades familiares.
Comentarios condescendientes: Utilizar un tono condescendiente o hablar lentamente a un colega debido a su origen o nivel de educación.Por ejemplo, explicar conceptos obvios a alguien de una cultura diferente de manera que sugiere que son ignorantes o menos capaces.
Asunciones sobre orientación sexual: Hacer comentarios o preguntas inapropiadas sobre la orientación sexual de un colega.Por ejemplo, preguntar a alguien si está casado con una persona del sexo opuesto sin tener en cuenta la posibilidad de que puedan tener una pareja del mismo sexo.
Exclusión o aislamiento: Excluir a un colega de actividades sociales o decisiones importantes en el trabajo debido a su identidad o características personales es otra forma de microagresión. Esto puede incluir no invitar a alguien a una reunión o evento, ignorar sus ideas en una discusión o simplemente evitar interactuar con esa persona.
Comentarios sobre habilidades lingüísticas: Burlarse o hacer comentarios despectivos sobre el acento o el nivel de habilidad en el idioma de un compañero de trabajo que hable un idioma diferente puede ser una microagresión.
Excesiva corrección: Corregir constantemente a un colega en su trabajo o en sus ideas de manera no constructiva puede ser una forma de minar su autoestima, especialmente si la corrección está motivada por prejuicios inconscientes.
Las microvalidaciones
Las microvalidaciones son el "antídoto" de las microagresiones. Se refieren a las pequeñas pero significativas acciones que se pueden tomar para demostrar respeto, comprensión y aprecio por los demás. Estas acciones validan la experiencia y perspectiva de los colegas, independientemente de su identidad o características personales. Las microvalidaciones pueden ser gestos verbales o no verbales, como escuchar activamente a los demás, reconocer sus logros y mostrar empatía hacia sus preocupaciones.
La presión emocional de lidiar con agresiones todos los días puede afectar a los empleados. Para algunos trabajadores de entornos subrepresentados, el trabajo remoto proporciona un respiro de las microagresiones. Para aquellos en el extremo receptor, los comentarios pueden parecer cualquier cosa menos "micro", según un artículo de Forbes.
El poder de las palabras positivas
En el contexto laboral, las microvalidaciones pueden tener un impacto transformador en la dinámica interpersonal y la cultura organizacional. Estas pequeñas muestras de respeto y aprecio pueden generar un ambiente laboral más inclusivo, donde los empleados se sientan valorados y respetados, lo que, a su vez, aumenta su compromiso y satisfacción en el trabajo.
Fomento de la diversidad de pensamiento: Cuando se practica, se abre espacio para la diversidad de pensamiento. Los empleados se sienten más seguros para expresar sus ideas y perspectivas únicas, incluso si difieren de la mayoría. Esto puede llevar a una mayor innovación y creatividad en el lugar de trabajo, ya que se están considerando una amplia gama de ideas.
Mejora del bienestar y reducción del estrés: Las microvalidaciones también juegan un papel crucial en el bienestar emocional de los empleados. Sentirse validado y apreciado reduce el estrés y la ansiedad en el trabajo, lo que contribuye a un ambiente más saludable y productivo. Además, cuando los empleados saben que sus colegas y superiores los respaldan, es más probable que busquen ayuda y apoyo cuando lo necesiten.
Construcción de relaciones de confianza: Son esenciales para construir relaciones de confianza en el lugar de trabajo. Cuando las personas se sienten escuchadas y valoradas, se sienten más cómodas al compartir sus desafíos y debilidades con sus compañeros. Esto conduce a equipos más cohesionados y colaborativos.
Prevención de conflictos interpersonales: El reforzamiento positivo puede actuar como un amortiguador contra los conflictos interpersonales. Cuando los empleados se sienten validados y respetados, es menos probable que se sientan ofendidos o heridos por comentarios o acciones inadvertidamente insensibles de sus colegas.
Promoción de un liderazgo empático: Los líderes que validan positivamente a sus empleados establecen el tono para un liderazgo más empático en toda la organización. Al demostrar respeto y consideración hacia sus empleados, los líderes fomentan una cultura de apoyo y cuidado.
Cómo implementar las microvalidaciones en el entorno laboral
Sensibilización y capacitación Continua: La primera medida para aplicar las microvalidaciones es asegurarse de que todos los empleados comprendan su importancia y significado. Proporcionar capacitaciones periódicas sobre diversidad, inclusión y comunicación efectiva ayudará a mantener a todos en la organización informados y comprometidos con estas prácticas.
Promover la escucha activa : Fomentar la escucha activa y la empatía en el lugar de trabajo es fundamental Los empleados deben ser alentados a prestar atención a los demás, sin interrupciones ni juicios precipitados. Asimismo, se debe fomentar la comprensión de los sentimientos y perspectivas de los demás para promover un ambiente de respeto y aprecio.
Reconocer y celebrar las diferencias: En lugar de tratar de minimizar o ignorar las diferencias entre los empleados, la organización debe celebrar la diversidad. Reconocer y valorar las diversas habilidades, experiencias y culturas que cada miembro del equipo aporta enriquecerá la dinámica laboral y creará un ambiente más enriquecedor.
Promover un feedback constructivo: Al proporcionar feedback, los empleados deben ser alentados a expresarse de manera constructiva y respetuosa. El feedback debe centrarse en el comportamiento y los resultados, no en características personales. Esto permitirá un intercambio de ideas más abierto y productivo.
Establecer políticas y procedimientos claros: Las políticas organizacionales deben estar diseñadas para proteger a los empleados de cualquier tipo de agresión y promover comportamientos positivos que alienten la autoestima de sus empleados. Establecer procedimientos claros para reportar incidentes de discriminación o prejuicio ayudará a crear un ambiente seguro y confiable.