La ola de calor no da tregua en gran parte del país, y la región del litoral está particularmente afectada, con una alerta roja por altas temperaturas que rige para varios departamentos entrerrianos, entre ellos Paraná, Diamante, Victoria, Nogoyá, Villaguay, Gualeguay, Victoria y La Paz.
Según el Servicio Meteorológico (SMN), la situación continuará hasta el viernes 10 de febrero, cuando finalmente algunas lluvias y tormentas hagan posible un descenso de la temperatura.
Qué hacer
Las recomendaciones brindadas por el Ministerio de Salud son aumentar el consumo de agua, no exponerse al sol en exceso ni en horas centrales del día, prestar atención a los bebés, niños y niñas y a las personas mayores, evitar las bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas, evitar comidas muy abundantes, ingerir verduras y frutas.
Asimismo, se aconseja reducir la actividad física, usar ropa holgada y de colores claros y permanecer en espacios ventilados o acondicionados.
Demanda de energía
Desde la empresa Energía de Entre Ríos (Enersa) se informó que a las 14.20 de este martes 6 de febrero, se produjo un récord histórico de demanda de energía en el sistema eléctrico de la provincia. Con motivo de las altas temperaturas sostenidas, la demanda fue de 984 MW, superando el pico de 972 MW del 20 de enero de 2023, también en horas de la siesta.
No obstante, el sistema eléctrico opera con normalidad, sin que se hayan registrado mayores inconvenientes, se indicó.
Ante esta ola de calor, Enersa reitera a sus usuarios la importancia de hacer un uso responsable de los artefactos eléctricos, especialmente entre las 13.30 y las 16.30, que es cuando aumenta el consumo.
A las 14.20 de este martes 6 de febrero, se produjo un récord histórico de demanda de energía en el sistema eléctrico de la provincia de Entre Ríos.
En ese sentido, se recomienda regular en 24° el aire acondicionado; y en caso de contar con más de uno en el domicilio, no utilizarlos todos al mismo tiempo. Asimismo, se aconseja apagarlo una vez que el ambiente esté refrigerado y verificar que las puertas y ventanas estén cerradas para mantener el ambiente climatizado.
También se pide desenchufar aquellos artefactos eléctricos que permanecen conectados a la red sin estar encendidos (cargadores de celulares, equipos de música, hornos de microondas, consolas de video juegos, etc.) ya que consumen electricidad de todas formas; y apagar la computadora si no se la utiliza.
Consecuencias en la producción
El ingeniero agrónomo especialista en producción lechera y productor de la zona de Maciá, Víctor Veik, aseguró que “la producción en los tambos caerá un 20% por la ola de calor”.
“El tambo viene de un tiempo complicado y en general se ve afectado porque siempre las inversiones son escasas, así que el tema de las altas temperaturas está pegando muy fuerte, especialmente en aquellos tambos que no tienen justamente toda la infraestructura necesaria para combatir el estrés calórico”, añadió.
Se denomina estrés calórico al conjunto de cambios fisiológicos y comportamentales que se desencadenan en los animales en ambientes con elevada temperatura, que ocurren cuando los mecanismos de adaptación de las vacas no logran eliminar el exceso de calor generado. Puede graves consecuencias sobre la salud animal, productividad y calidad del producto.