"Es un gran orgullo tener a Los Palmeras en Hollywood"
El Cónsul General de la República Argentina recibió a Marcos Camino y “Cacho” Deicas en el Paseo de la Fama donde se entregan los Oscars. Furia por la cumbia santafesina en medio de una gran colonia latina.
"Es un gran orgullo tener a Los Palmeras en Hollywood"
Héctor Monacci, Cónsul General de la República Argentina en Los Ángeles, recibió a Los Palmeras en el lugar más emblemático de la ciudad, en el corazón del Paseo de la Fama en Hollywood donde se entregan los Oscars. Antes del multitudinario show de los santafesinos en esta ciudad, la autoridad más importante del país en medio de un estallido de latinos, fue contundente en el mano a mano con El Litoral: “Es un gran orgullo como argentinos en el exterior recibir a Los Palmeras, que son embajadores de la Argentina con su música en cada rincón del mundo. Estamos al tanto del USA Tour, como así también de lo que fue la repercusión de la gira pasada en España”.
Además, contó una experiencia familiar que luego conectamos: cuando Los Palmeras desembarcaron en Hollywood Boulevard y Vine Street, un chico se presentó, les dio la mano y les dijo a Marcos y “Cacho” que los admiraba. Luego, el propio funcionario de la República Argentina contó a los integrantes del USA Tour (Carlos Fertonani y el “Negro” Velásquez) que se trataba de su propio hijo. “Van todos al show, con los amigos de estudio”, comentó.
A su turno, Sergio Rojo, Cónsul Adjunto de la República Argentina, explicó la importancia del emblemático lugar que eligieron para recibir a Los Palmeras.
“El Teatro Chino de Grauman inaugurado en 1927 es uno de los más emblemáticos de Hollywood”, explicó. Forma parte de la historia del cine por ser el lugar de celebración de los Oscar desde 1944 hasta 1946 y en su entrada podemos encontrar las famosas baldosas con las huellas de las estrellas del celuloide.
Fotos: Vecc Schiafino
Después del éxito del cercano Teatro Egipcio, Grauman, que tras un viaje a China se quedó enamorado de su cultura, desarrolló los planes con el arquitecto Raymond Kennedy para su construcción. Las obras comenzaron en 1926 con Norma Talmadge que puso la primera pala de tierra y la actriz china Anna May Wong que clavó el primer remache en las vigas de acero.
Finalmente, el 18 de mayo de 1927 quedó inaugurado el Teatro Chino de Grauman con la proyección de la película «Rey de reyes» de Cecil B. DeMille.
Considerado un monumento histórico-cultural desde 1968, siempre ha habido un programa de restauración en proceso para mantenerlo. Después del terremoto de Los Ángeles de 1994, se contrataron expertos geólogos para inspeccionar el teatro y asesorar a los propietarios en cuanto a protección y fortalecimiento de toda la estructura.
Protegido por sus muros curvos de más de 12 metros de altura y sus torres con techo de cobre se encuentra el legendario patio delantero. Las fuentes en forma de loto de tres metros de altura dan la bienvenida a sus visitantes.
El teatro se eleva a 27 metros de altura con dos columnas gigantes de color rojo coronadas por máscaras de hierro forjado que sostienen el techo de bronce. Entre las columnas hay un dragón de 9 metros de alto tallado en piedra y custodiando la entrada del teatro están los dos «Heaven Dogs» gigantes originales traídos de China.
Además de su diseño chino, la característica más distintiva del teatro es el famoso Patio de las Estrellas, con cerca de 200 huellas de manos y autógrafos de celebridades desde Marilyn Monroe hasta Tom Hanks, las piernas de Betty Grable, la nariz de Jimmy Durante y las varitas mágicas del trío heroico de Harry Potter.
“Nunca hubiéramos pensado llegar hasta acá con la música de Los Palmeras desde Santa Fe. Tampoco lo que se da con la gente, estábamos con Rubén conociendo las estrellas en el piso y la gente nos reconocía; te pedía una foto o un video. Es algo increíble”, le respondió Marcos Camino a los dos anfitriones de lujo en esta ciudad: el Cónsul General (Héctor Monacci) y el Cónsul Adjunto (Sergio Rojo).