Ricardo Daniel Carías, conocido como "La Tota" Santillán, ha sido denunciado por su exmujer, quien es también madre de sus dos hijas.
El conductor fue denunciado en 2019 por su ex pareja, madre de sus dos hijas. El próximo 9 de junio se conocerá el veredicto.
Ricardo Daniel Carías, conocido como "La Tota" Santillán, ha sido denunciado por su exmujer, quien es también madre de sus dos hijas.
El fiscal Oscar Ciruzzi, solicitó una pena de cuatro años y medio de prisión por violencia de género y amenazas hacia su exmujer, su exsuegro y su exempleada doméstica.
La solicitud detalla los delitos imputados al conductor, que incluyen amenazas agravadas con el uso de armas, privación ilegítima de la libertad agravada por la relación de pareja y lesiones leves agravadas por violencia de género.
Según informó el sitio oficial del Ministerio Público Fiscal, el juez estableció que el 9 de junio se le dará la oportunidad al acusado de presentar su defensa y luego se dictará el veredicto.
El fiscal Ciruzzi recordó un incidente ocurrido en 2013, cuando Carías y su pareja vivían en el barrio de Belgrano. Después de una discusión, Carías la insultó, la arrojó sobre una cama y la amenazó con una tijera, colocándola cerca de su ojo mientras repetía que se lo arrancaría.
“En cada amenaza renovaba el dolo y la intención de continuar con sus acciones y esto debe entenderse en un análisis de género global relacionado con el resto de los hechos”, destacó el fiscal.
Se describió que la mujer logró levantarse, pero cuando intentó salir de la habitación, Carías la empujó y cayó al suelo, donde fue golpeada. Luego, la volvió a agredir con un cinturón y la retuvo en el lugar durante un tiempo prolongado, causándole una lesión en el tobillo.
Según la acusación, durante el verano de ese mismo año, mientras se encontraban en Mar del Plata, Carías conduciendo un automóvil aceleró repentinamente mientras amenazaba diciendo: “Te voy a matar en el acantilado y nadie te va a encontrar". La mujer, asustada, intentó abrir el auto para escapar, lo que finalmente llevó a que Carías detuviera el vehículo.
El fiscal mencionó otro incidente ocurrido en Santiago del Estero en agosto de 2014, cuando durante una discusión, Carías agarró del cuello a su pareja y comenzó a estrangularla.
A pesar de los intentos de la víctima por pedir ayuda, el acusado la encerró en el baño, la zarandeó y le tapó la boca con su puño impidiéndole gritar.
También explicó que, durante la instrucción del caso, la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional determinó que todos los hechos debían ser tratados juntos, sin importar el lugar donde ocurrieran.
La Cámara afirmó que las agresiones repetidas sufridas por la víctima, tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en otras localidades, formaban parte de un mismo contexto de violencia de género.
Al analizar lo sucedido, el fiscal destacó los relatos detallados de la víctima a lo largo de la investigación y durante el juicio oral, donde describió de manera precisa cada una de las agresiones y situaciones que vivió cotidianamente.
Por otro lado, resaltó el testimonio de la psicóloga que trató a la denunciante y el informe de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema, que concluyó que tanto la mujer como sus hijas se encontraban en una "situación de alto riesgo".
Además, se presentaron pruebas de medidas cautelares dictadas en un caso civil y registros médicos que confirmaron las heridas en el tobillo, el rostro y el tabique nasal.