Después de años años de pedidos, el enigma por la desaparición de Arshak Karhanyan (29), el agente de la Policía de la Ciudad desaparecido en febrero de 2019, llegó a una audiencia presidencial.
Lo anunció el Gobierno luego de que el presidente Alberto Fernández se reuniera con los familiares del joven.
Después de años años de pedidos, el enigma por la desaparición de Arshak Karhanyan (29), el agente de la Policía de la Ciudad desaparecido en febrero de 2019, llegó a una audiencia presidencial.
Alberto Fernández recibió este martes a los familiares del joven que trabajaba en la comisaría de Caballito y desapareció después de conversar con un compañero de la fuerza.
La angustia de la familia Karhanyan tuvo por primera vez la atención del Poder Ejecutivo. El Presidente, junto con el ministro de Justicia de la Nación, Martín Soria, y la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, atendieron a los familiares de Karhanyan, que le habían solicitado sin éxito una audiencia al ex presidente Mauricio Macri y durante un año y medio había repetido la solicitud con Fernández.
Tras el encuentro, el Gobierno informó que se resolvió aumentar a $ 5 millones la recompensa para quien aporte datos que permitan conocer el paradero del agente, según consignó la agencia Télam.
En conferencia de prensa en la Casa Rosada, el ministro Soria señaló que la causa está "plagada de irregularidades" y que "hay cámaras que misteriosamente se perdieron" en el caso.
Los familiares reclaman por la desaparición de Arshak, que el 24 de febrero de 2019 estaba de franco y a la noche tenía arreglado encontrarse con una joven. Leonel Herba (32), compañero de él en la fuerza, fue a buscarlo hasta su casa, en avenida Directorio 963, en Caballito. Arshak lo atendió en la vereda. Una cámara de seguridad grabó el momento.
Eran las 12.46. Según la familia del oficial desaparecido, se lo veía algo incómodo con la conversación que duró poco más de media hora. El video también muestra que Herba le hizo escuchar de su celular un audio a Arshak. Nunca se supo el contenido del mensaje ya que cuando los peritos revisaron el celular, los mensajes habían sido borrados.
Karhanyan, de 29 años, estudiaba en la UTN, es especialista en sistemas y tecnología, y se desempeñaba en la comisaría del barrio de Caballito ubicada en la calle Valle, luego de haber pasado por el área de cibercrimen y por la División Exposiciones.
Tras la charla con su compañero de fuerza, Arshak, que vivía en un sexto piso, subió a buscar su billetera, su pistola reglamentaria y salió.
En su casa dejó su iPhone. No usó su moto para ir hasta la estación Primera Junta del subte A a retirar plata del cajero automático. Sacó $ 2.000 y fue hasta el Easy de Rivadavia y Paysandú a comprar una pala de $ 1.500. Nadie sabe por qué ni para qué. Se le perdió el rastro luego de que caminara por esa avenida hacia Flores y doblara hacia Yerbal.
En 2014, Karhanyan ingresó a la Policía Metropolitana, donde se desempeñó en el área de Cibercrimen y participó como perito en la investigación por la muerte del fiscal Alberto Nisman.
Con la creación de la Policía de la Ciudad, fue asignado a la División Investigaciones y luego trasladado a la comisaría vecinal 7B. Paralelamente, estudiaba ingeniería informática en la Universidad Tecnológica Nacional (UTN).
La causa por “averiguación de paradero” de Arshak se tramita en la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N° 2, a cargo del fiscal Santiago Vismara.
La investigación genera cuestionamientos de la querella. Es que por ejemplo, unos 150 agentes de la Policía Federal y la Gendarmería rastrillaron más de un año y medio después de la desaparición la zona donde su familia pidió que se investigue desde el primer día.
Las sospechas que tiene la querella sobre la desaparición de Arshak surgen a partir de lo que ocurrió después de que lo vieran por última vez. "Estamos trabajando en el pedido del cambio de calificación de la causa, entendiendo que Arshak desapareció y los policías de la Ciudad que participaron de esta investigación hicieron las cosas de tal manera que la verdad quede oculta", había señalado Juan Kassargian, abogado de la familia.