Tres patovicas fueron absueltos en tanto uno resultó condenado a 9 años de prisión, por el homicidio de Emiliano Arri, ocurrido la madrugada del 24 de septiembre de 2017, dentro del boliche On-Club de la ciudad de Gálvez.
El tribunal de juicio falló este lunes en forma unánime. El debate, que comenzó el año pasado, tuvo por fin determinar qué pasó la madrugada del 24 de septiembre de 2017, cuando fue asesinado Emiliano Arri.
Tres patovicas fueron absueltos en tanto uno resultó condenado a 9 años de prisión, por el homicidio de Emiliano Arri, ocurrido la madrugada del 24 de septiembre de 2017, dentro del boliche On-Club de la ciudad de Gálvez.
La sentencia fue dada a conocer este lunes, pasado el mediodía, cuando los jueces del tribunal pluripersonal, integrado por Sergio Carraro, Héctor Gabriel Candioti y Luis Octavio Silva, declararon culpable a Juan Pablo Rivero, un empleado de seguridad de 42 años de edad, que además es docente de una escuela Técnica.
Además, por unanimidad, absolvieron a Juan Pablo Ortíz (39), el policía José Francisco Carrizo (34) y Claudio Sebastián Ojeda (40), dos de los cuales habían sido acusados como partícipes necesarios y el tercero como partícipe secundario del homicidio.
Mientras, el quinto imputado -Cristian David Serrano (34)- quedó fuera del juicio ya que tiene un recurso de apelación pendiente.
El juicio comenzó el 4 de diciembre del año pasado, y contó con la intervención de los jueces Carraro, Candioti y Silva; los fiscales Martín Torres y Gonzalo Iglesias; el querellante Raúl Berizo, como representante de la familia Arri; y los imputados con sus respectivas defensas: Néstor y Sebastián Oroño -por Rivero-, Claudio Torres del Sel y Natalia Giordano -por Ojeda-, Hilda América Knaeblein y Sebastián Gervasoni -por Carrizo- y Martín Montegrosso y Guillermo Morales -por Ortíz-.
En total estaban previstas las declaraciones de 64 testigos que fueron citados a juicio, por lo que las audiencias se extendieron hasta el año siguiente.
Emiliano Iván Arri (39) murió asfixiado en un intento por reducirlo y sacarlo del local de calle Belgrano al 600 el 24 de septiembre de 2017. Esa madrugada los patovicas acarrearon al joven hasta el sector del guardarropas, donde le aplicaron una "llave" hasta que perdió el conocimiento.
Para el fiscal Torres, "Rivero lo tomó del cuello mientras los otros hombres sostenían sus extremidades para que no escapara". "Arri murió por un mecanismo de asfixia por compresión que fue causado por una 'llave' practicada con ambos brazos por Rivero". Y "resulta claro que el autor del delito no hubiera podido llevar adelante su conducta violenta sin la colaboración de las otras cuatro personas", sostuvo en su alegato de apertura, donde adelantó que pediría penas de entre 6 años y medio, hasta los 20 años de prisión, siendo la más abultada para Rivero, que finalmente fue condenado a menos de la mitad.
Por último, se informó que el tribunal no hizo lugar al pedido de invalidez del juicio que habían solicitado los abogados de uno de los acusados. Asimismo, rechazó un planteo promovido por las defensas de los cuatro hombres juzgados para que se declare inválido y nulo el alegato de clausura y la acusación del querellante.
Esperan fundamentos
"Esperaremos los fundamentos del tribunal para considerar en profundidad los motivos que dieron sustento a esta decisión final", sostuvo el fiscal Martín Torres, quien representó al MPA –junto al fiscal Gonzalo Iglesias– en el debate oral. "Luego de estudiar esos fundamentos, resolveremos los pasos a seguir". El fiscal señaló que "veremos qué tuvieron en cuenta los magistrados en relación a la pretensión punitiva de nuestra acusación" y agregó que "analizaremos por qué se condenó sólo a una persona y en los términos en los que se lo hizo, y los motivos por los cuales fueron absueltos los otros tres hombres que fueron juzgados". Consultado acerca de la pena de nueve años ordenada para Rivero, el fiscal reiteró que "seremos prudentes y aguardaremos los fundamentos de la resolución para ver en base a qué pautas los jueces fallaron como lo hicieron".