Un abogado y un policía de la ciudad de Santa Fe comenzaron a ser juzgados este viernes en los Tribunales locales, por una vieja causa por el intento de extorsión a un preso.
El debate comenzó este viernes y se extenderá hasta la semana que viene. La Fiscalía pidió 5 años de prisión para ambos.
Un abogado y un policía de la ciudad de Santa Fe comenzaron a ser juzgados este viernes en los Tribunales locales, por una vieja causa por el intento de extorsión a un preso.
Según informó la Oficina de Prensa del Ministerio Público de la Acusación (MPA), los fiscales Ezequiel Hernández y Bárbara Ilera, pedirán cinco años de prisión y multas para cada uno de los acusados, así como que se los inhabilite por 10 años para desarrollar las actividades laborales que tenían al momento del hecho ilícito.
Ambos fueron imputados como coautores de una tentativa de extorsión, calificada por haber sido cometida con ánimo de lucro y con abuso en el desempeño de la profesión de abogado y de la función policial.
El debate, que tiene en el banquillo de los acusados al abogado Sebastián Gervasoni (42) y al policía Martín Horacio Herrera (42) -defensas Sebastián Moleón y Sebastián Oroño-, está presidido por el juez Pablo Busaniche, quien el viernes de la semana que viene podría dictar sentencia, de acuerdo con lo programado por la Oficina de Gestión Judicial (OGJ).
El caso se remonta al domingo 2 de junio de 2017, en horas de la tarde, en las instalaciones de la ex Comisaría Cuarta de barrio Roma, donde “el hombre que resultó víctima permanecía encerrado en una celda a pesar de que ese día se había dispuesto su libertad”, informó el fiscal Hernández antes de los alegatos de apertura.
Para los fiscales el uniformado Herrera, “le aseguró al detenido que su caso estaba complicado pero que si le entregaba 10.000 pesos y una bolsa de cocaína, sería liberado de inmediato y no tendría inconvenientes con la libertad condicional que le habían otorgado en el marco de otro legajo judicial”.
Tras el pedido de coima, el policía “se contactó con el abogado investigado para que fuera hasta la dependencia” y “una vez allí, el profesional le dijo a la víctima que él tenía vínculos con 'muchos fiscales' y que 'manejaba a la policía', y le reiteró la exigencia de dinero”, reseñaron desde el MPA.
El fiscal Hernández detalló que “el intento de extorsión fue presenciado por una mujer que era la pareja del detenido y, en el hall de la comisaría, le dio al oficial acusado un teléfono celular y los papeles de dominio de una motocicleta”. Según aclaró, “el dispositivo y la documentación fueron tomados como garantías de que la víctima reuniría lo que le habían requerido los investigados”.
“A partir del acuerdo al que llegaron, quien estaba privado de su libertad fue liberado”, planteó el representante del MPA.
Hernández valoró que “un día después del amedrentamiento, el hombre al que trataron de extorsionar y su pareja se dirigieron a la sede del MPA ubicada en 1° de Mayo 2820 e informaron lo que había sucedido”. En tal sentido, expuso que “la por entonces fiscal Mariela Jiménez oyó lo que la víctima relataba en Mesa de Entradas, se comunicó con Asuntos Internos de la policía provincial para que tomaran la declaración e inició la investigación”.
En tanto, destacó que “de forma coordinada con la Fiscalía, los uniformados que se encargan de las diligencias vinculadas a irregularidades de la fuerza de seguridad santafesina organizaron una entrega controlada”.
“El martes de esa semana al mediodía, el hombre intimidado y su pareja fueron hasta la Comisaría Cuarta, hablaron con el oficial acusado y él los instó a que se comunicaran con el otro coautor para establecer un punto de encuentro”, precisó. “Por teléfono, el abogado le ordenó a la víctima que fuera hasta Facundo Zuviría y Diagonal Goyena, dirección que luego cambió por Hernandarias y avenida Peñaloza”, manifestó.
“Minutos antes de las 16:30, el profesional del Derecho y la persona a la que intentó extorsionar se encontraron para concretar el intercambio”, señaló. “El abogado le entregó a la víctima el teléfono celular y la documentación que la mujer le había dado al policía; y recibió 4.000 pesos en billetes previamente individualizados”, puntualizó.
Finalmente, Hernández resaltó que “en el acto, personal de Asuntos Internos aprehendió al abogado y le secuestró el dinero y un automóvil en el que había llegado hasta el lugar”.